SYDNEY.- La joven estadounidense Abby Sunderland, de 16 años y que tuvo que ser rescatada cuando navegaba en solitario alrededor del mundo, planea ya su próximo viaje pese a las horas dramáticas que vivió.
"Lo intentaré de nuevo", declaró a los medios australianos desde el pesquero francés "Ile de Réunion", que la salvó el sábado de las aguas del océano Índico.
Previamente vivió horas de angustia, porque en la zona en la que navegaba con el mástil partido había una fuerte tormenta y la operación de rescate duró hasta que se hizo de noche. Por fin llegó la buena noticia de las autoridades marítimas australianas: "El capitán informó que la señorita Sunderland está a salvo y bien a bordo".
Abby se vio envuelta con su velero "Wild Eyes" el viernes en una fuerte tormenta a más de 3.000 kilómetros de la costa. Junto con el mástil perdió su comunicación por satélite con el resto del mundo. Sin embargo, equipos de salvamento australianos avistaron el barco desde aviones y le aseguraron por radio que el rescate estaba en camino. Todavía pasó 24 horas en medio de frías temperaturas hasta que el pesquero pudo llegar al lugar.
Como el "Ile de la Réunion" está en viaje comercial y no puede interrumpir su curso para llevarla a tierra, Abby subirá a otro barco que ya vaya de vuelta a casa. Todavía no se sabe si será trasladada a Réunion, al este de Madagascar, o a Australia.
"Es probable que pasen todavía algunas semanas hasta que Abby vuelva a California", indicaron sus padres.
Abby se defendió de las acusaciones que señalaban que era demasiado joven para una aventura de tal magnitud. "En lo que a la edad se refiere, ¿desde cuándo la edad causa olas gigantescas y tormentas?", escribió en su blog cuando se encontraba ya a bordo del pesquero francés.
"Como todos ustedes saben, tuve algunos días bastante tormentosos", indicó, y afirmó que está tratando de superar el hecho de que no verá nunca más a su velero. Su mala suerte fue el temporal, aseguró. "En resumen: había una ola interminable y un mástil muy corto... de dos pulgadas (cinco centímetros)", escribió.
Los padres de la joven agradecieron en la página de Internet a todos los rescatistas que asistieron a su hija. "Se ocuparon de nuestra hija como si fuera la suya. Gracias por incluso haber superado nuestras expectativas para garantizar su seguridad".
También los padres enfrentaron críticas por dejar a su hija hacer el viaje. "No nos engañemos, la vida es peligrosa", comentó el padre, Laurence Sunderland, en la televisión estadounidense. "¨Cuántos adolescentes mueren en accidentes de coche?"
La joven comenzó su travesía en enero, con la esperanza de superar la marca de la australiana Jessica Watson, que acalló hace poco este tipo de críticas en su país tras terminar el viaje a salvo y convertirse en la navegadora más joven que da la vuelta al mundo.
Watson, cinco meses mayor que Sunderland cuando partió de Sydney, completó su travesía el pasado 15 de mayo, a tres días de su 17 cumpleaños, y fue recibida como una heroína en Sydney.