WASHINGTON.- Casi ocho semanas después de que se produjera el accidente en la plataforma operada por la británica BP en el golfo de México, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, viajó a la región y se mostró optimista con respecto a la superación de la catástrofe.
La región afectada en el sur de Estados Unidos se recuperará, destacó Obama este lunes en Theodore, en el estado de Alabama.
El mandatario se encuentra en la región, donde realizará una visita de dos días por los estados afectados.
Obama destacó además que las negociaciones con BP se encuentran en buen camino. Ya hubo primeras conversaciones con la compañía petrolera sobre cómo desarrollar un proceso a largo plazo para el pago de las indemnizaciones correspondientes, informó.
Los pagos a realizarse deben ser "adecuados, justos y rápidos", insistió, al tiempo que comentó que las conversaciones con BP estaban siendo constructivas y que esperaba se produjera un progreso considerable antes de la conversación que mantendrá el miércoles con el presidente del consejo de administración de BP, Carl-Henric Svanberg.
Obama hizo hincapié en el hecho de que, ante la presión ejercida por el gobierno local, BP mejoró considerablemente sus planes para contener el vertido de petróleo. Además, precisó que la empresa prevé captar 6,800 toneladas diarias (en relación con las actuales 2.100) hasta fines de junio.
Entre los progresos registrados desde que se produjo el accidente en la plataforma "Deepwater Horizon" el 20 de abril, Obama mencionó que ahora la compañía operadora, BP, se prepara mejor ante posibles tormentas y demás imprevistos, y no dejó de reforzar que la Casa Blanca hará que "BP y todas las partes" correspondientes asuman su responsabilidad.
El gobierno está implementando todos los medios a su alcance para combatir esta crisis. Sin embargo, la marea negra es "un ataque constante que cambia permanentemente de dirección" y eso es lo que hace que los esfuerzos para poner fin a este capítulo sean tan complejos y lentos, lamentó.
