CEBÚ.- Quince personas murieron y otras 48 resultaron heridas dejó el choque de un bus contra una barrera de concreto, en la localidad de Toledo, provincia de Cebú, Filipinas.
La máquina, que transportaba obreros que regresaban a sus casas, viajaba a exceso de velocidad cuando los frenos no respondieron al tomar una curva. Acto seguido, se estrelló tras la maniobra del conductor para no arrollar a un grupo de transeúntes.
Según el agente policial Erson Digal, la mayor parte de las víctimas murieron dentro del bus, pero otras cinco perecieron del impacto tras ser arrojadas del vehículo. Entre las víctimas figuran una madre y su hijo, quienes fueron encontrados abrazados.
"Ocurrió todo tan rápido. Los residentes escucharon el estruendo del choque y los pedidos de socorro de muchas personas", dijo Digal.
Tras recibir tratamiento médico, el conductor de accidentado bus fue detenido para ser interrogado.