BRUSELAS.- Un belga de 50 años, acusado de violar reiteradamente a su hija, justificó su delito aduciendo que esos abusos eran "algo normal".
El imputado, cuya causa se ha empezado a instruir en el Tribunal Correccional de Amberes (norte de Bélgica), está acusado además de haber pagado entre 300 y 400 euros (201.661 y 268.880 de pesos) mensuales a su hija para que se comportará en las relaciones sexuales de forma "más complaciente", informó la "Agencia Belga".
El acusado se justificó ante el juez de instrucción con la afirmación que la hija "aceptaba cada uno de los encuentros".
Los abusos, que presuntamente se prolongaron a lo largo de años, fueron calificados de "repugnantes" por la Fiscalía, que imputó al presunto violador de "tratar a su hija como a una prostituta".
La defensa del agresor reclamó la absolución del hombre, alegando que no se puede demostrar que las relaciones no fueran consentidas y pidió que el tribunal tenga en cuenta que su cliente aceptó someterse a tratamiento psicológico.
El Ministerio Público le recriminó que siguiera haber sugerido que "una hija pueda consentir relaciones sexuales con su padre".