BANGKOK.- El Gobierno de Tailandia prorrogó hoy por tres meses, hasta el 19 de octubre, el estado de excepción en el sur del país por el conflicto separatista islámico que atenaza ese territorio y que ha causado más de 4.000 muertos desde 2004.
La medida afecta a las provincias de Pattani, Yala y Narathiwat, donde los ataques con armas ligeras, asesinatos y explosivos se suceden casi a diario pese al despliegue de 31.000 agentes de las fuerzas de seguridad.
El portavoz del Gobierno, Supachai Jaismut, explicó a los periodistas que "la disposición es imprescindible para permitir a los cuerpos de seguridad que puedan hacer su trabajo".
Después de una década de escasa actividad, el movimiento separatistas islámico del sur de Tailandia reanudó la lucha armada con el asalto de un cuartel militar, en enero de 2004.
Las autoridades impusieron el estado de excepción al año siguiente para intentar cortar la escalada de violencia.
Los insurgentes denuncian la discriminación que sufren por parte de la mayoría budista del país y exigen la creación de un Estado islámico que integre estas tres provincias, que formaban parte del antiguo sultanato de Pattani cuando fueron anexionadas hace un siglo por el Reino de Siam.