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Obama pasa fin de semana con su familia en Maine

El presidente de Estados Unidos decidió alejarse por unos días de la Casa Blanca para compartir con su esposa y sus dos hijas.

16 de Julio de 2010 | 22:58 | AP
MAINE.- Alentado por una victoria crucial en el Congreso y por las buenas noticias sobre el derrame en el Golfo de México, el presidente Barack Obama decidió relajarse y comenzó el viernes un viaje de fin de semana en una montaña desde donde se divisa la costa del Atlántico.

Unas horas después de aterrizar en el aeropuerto de Bar Harbor, en una versión más pequeña del avión presidencial, Obama, su esposa Michelle y sus hijas Malia y Sasha, caminaron cuesta arriba por las laderas de granito en la cumbre de la Montaña Cadillac, en el Parque Nacional Acadia.

Con unos 466 metros (1.530 pies), es la montaña más alta en la costa del este, de acuerdo con el Servicio de Parques Nacionales.

La familia también paseó en bicicleta durante una hora, en una pista cerrada que pasa junto a un lago. Su visita concluiría el domingo por la mañana, y no está previsto acto público alguno.

Las breves vacaciones proporcionaron ya muchas oportunidades de tomar fotos a un presidente que, evidentemente, ha tenido una buena semana.

Antes de salir de Washington, Obama habló ante las cámaras de televisión en el Rosedal de la Casa Blanca para abordar las noticias del derrame petrolero, que ha cesado por primera vez en 12 semanas.

Visiblemente aliviado, Obama consideró que era una "buena noticia", pero enfatizó que el tapón colocado en el pozo petrolero era una medida cuando mucho temporal.

El jueves, el Senado envió a Obama un paquete de nuevas reglas para el mercado financiero. El mandatario había insistido en que esa ley era crucial para la recuperación económica y para impedir que se repitiera el colapso financiero del 2008.

Pero en Maine, al menos por un par de días, Obama pareció también contento por dejar atrás la política y concentrarse en su familia.

Luego de caminar por la montaña, la familia Obama compró helados. "Elegí uno de coco", dijo Obama cuando salía de la nevería. Mientras lamía el helado y lo recomendaba a los presentes, el mandatario se tomó fotos con algunos estudiantes alemanes de intercambio, a quienes saludó en alemán.