OBERHAUSEN.- El pulpo "Paul", el octópodo adivino del Mundial de Sudáfrica, aprovechará su enorme fama para una buena acción: salvar a las tortugas marinas de la isla griega de Zakynthos, informaron los portavoces del acuario en el que vive, el Sea Life de la ciudad alemana de Oberhausen.
A partir de ahora, todo el dinero que se recaude con la publicidad y merchandising del cefalópodo se destinará a sufragar los costes de una misión dedicada a ayudar a las tortugas marinas de esa isla, en peligro de extinción.
Así lo acordó el acuario de Oberhausen con la agencia inglesa de artistas CDM. "Para un animal, ayudar a otros animales es una oportunidad magnífica", subrayó su representante, Chris David, en un comunicado.
La misión fue fundada por la organización medioambiental "Earth, Sea and Sky". Cada verano, las tortugas verdes de Zakynthos ponen entre 1.000 y 2.000 nidos en las playas de la isla. Sin embargo, debido al continuo aumento del turismo y al poco cuidado medioambiental, cada vez nacen menos crías.
"Nuestra acción de rescate incluirá un centro de información para muchos turistas, para que se informen de qué hacer ante un nido de tortugas", adelantó Yannis Vardakastanis, de "Earth, Sea and Sky".
El activista prometió que si "Paul" consigue con su imagen el dinero necesario para la misión, nunca más volverá a comer pulpo. "Y todos saben lo que eso significa, porque no hay ningún pueblo al que le guste comer más pulpo que al griego", dijo.
El alcalde de la localidad española de Carballino, Carlos Montes, otorgó la distinción de "Amigo predilecto" al mundialmente famoso octópodo, que predijo los resultados de todos los partidos de la selección de su país en el Mundial de Sudáfrica, así como la victoria de España.
