CINCINNATI.- Una mujer que trataba de fugarse de la Policía para no ser arrestada por manejar a alta velocidad se detuvo este viernes para obedecer la luz roja de un semáforo, en Estados Unidos.
La conductora mujer de 26 años iba a 126 kilómetros por hora en un tramo de autopista donde la velocidad máxima permitida es de 86 km/h, cuando un agente trató de hacerla parar. La mujer salió de la autopista y continuó manejando hacia su casa.
Cuando entró a conducir por la calles locales, iba a la velocidad permitida y se detuvo ante la luz roja de un semáforo. La Policía utilizó palos con los que pincharon las llantas de su vehículo a pocos metros de su casa.
La mujer dijo que tenía miedo que le incautaran el automóvil, lo que la institución hizo acto seguido.
La Policía tuvo que usar una pistola paralizante antes de arrestarla y acusarla de resistirse al arresto, no obedecer a la policía, manejar más allá de la velocidad permitida y conducir pese a que su licencia había sido suspendida.