BEIRUT.- El jefe de la Fuerza Interina de la ONU para el Líbano (FINUL), el general español Alberto Asarta, afirmó que el Líbano e Israel desean preservar la calma y apoyan la redefinición de la "línea azul" donde no es visible.
El general Asarta hizo estas declaraciones después de una reunión tripartita celebrada ayer, miércoles, en el paso fronterizo de Ras Nakura, donde se reúnen periódicamente israelíes y libaneses bajo el auspicio de la FINUL.
"Nadie desea una escalada de violencia. Las partes deben esforzarse para mantener el cese de las hostilidades", dijo Asarta, dos semanas después de un choque entre ambos Ejércitos, en el que murieron cuatro personas -un israelí y tres libaneses-.
El enfrentamiento, ocurrido el pasado 3 de agosto, se produjo cuando soldados libaneses trataron de impedir que militares israelíes talaran árboles en territorio que el Líbano considera propio.
El jefe de la FINUL subrayó que ha recibido garantías de que ambas partes continuarán trabajando en estrecha colaboración para mantener la calma en la zona.
Asimismo, indicó que en la reunión de anoche se examinó el modo de acelerar el proceso de la delimitación de la línea azul establecida en 2000 por la ONU, para asegurar la retirada israelí del sur libanés tras 22 años de ocupación.
Partes de dicha línea, que no corresponde con la frontera, desaparecieron durante la guerra de 2006 entre Israel y Hizbulá, que dejó 1.200 muertos del lado libanés, en su mayoría civiles, y 164 del israelí, la mayor parte de ellos militares.
"El proceso de hacer visible el marcado de la línea azul en el terreno es una empresa importante para reducir la tensión y evitar la eventualidad de violaciones inadvertidas", aseguró.
El general Asarta estimó que "las deliberaciones tendrán un impacto positivo en la rapidez y la exactitud del trabajo técnico de la FINUL, que se realiza con las partes sobre el terreno, para que la línea azul sea visible".