LIMA.- Un grupo de encolerizados clientes de un prostíbulo peruano destrozó el recinto y quemó sus enseres en protesta porque eran "mal atendidos" y sometidos a constantes robos.
Según el reporte policial, unas veinte personas sacaron catres, colchones y otros objetos a la vía pública y les prendieron fuego en una calle céntrica de Ayacucho.
Los parroquianos dijeron que llegaban al local -que funcionaba clandestinamente y sin nombre- en busca de diversión, pero que las prostitutas no les daban una buena atención y que más bien eran víctimas de constantes robos.
La situación llegó a su clímax la noche del martes, cuando varios de los asistentes al burdel constataron que les habían sustraído sus pertenencias, incluyendo sus ropas interiores.
Tras culpar del hecho a las meretrices y a sus supuestos cómplices, los enfurecidos asistentes destrozaron las habitaciones del local y luego se fugaron.
A los parroquianos se unieron algunos vecinos que aseguraron que están cansados de escándalos en la zona, donde proliferan numerosos burdeles con fachada de discotecas.