Berlusconi ataca de nuevo: Critica a jueces y cuenta chiste de judíos en un video

ROMA.- Una nueva polémica envuelve al primer ministro italiano Silvio Berlusconi, luego de que el diario "La Repubblica" publicara, en su edición digital, un video donde aparece criticando a los magistrados y contando un chiste sobre judíos, mientras sostiene una distendida conversación con un grupo de seguidores en su residencia de Roma.

El video fue grabado por un aficionado durante la noche del 29 de septiembre, cuando Berlusconi bajó a saludar a un grupo de jóvenes que lo esperaban en las puertas de su residencia, durante la celebración de su cumpleaños 74.

En la grabación, Berlusconi conversa con los jóvenes en un tono jocoso acerca de su portavoz, Paolo Bonaiuti, de quien dice que "ya está agilipollado" de tanto tener que desmentir sus declaraciones que aparecen en la prensa.

Después empieza a hablar de los jueces y asegura que en el seno de la magistratura "existe una asociación criminal" que quiere dar vuelta el resultado obtenido en las urnas.

"Existe un acuerdo entre los jueces de izquierdas para dar la vuelta a los resultados de las elecciones, quieren eliminar a quien ha sido elegido y esto es como una losa sobre nuestro sistema democrático", señala el primer ministro.

En el video, Berlusconi también se jacta de su arrastre con las mujeres y les dice a los jóvenes que tiene "una chica y una historia cada día" y luego les cuenta un chiste sobre judíos, que ha sido calificado por la oposición como "antisemita" y criticado por las asociaciones judías del país.

Tras ver el video, el diputado del Partido Demócrata Michele Ventura expresó: "Ataques a jueces, chistes antisemitas y pavonearse de sus cualidades físicas, a Berlusconi le interesa sólo esto y no el país ni sus problemas".

También la Asociación Nacional de Magistrados emitió un comunicado en el que manifestó que las "invenciones" del primero ministro "contribuyen a alimentar un clima de tensión que sólo perjudica al país".

Ante las críticas sobre el chiste, Berlusconi emitió una nota en la que declaró que "no ofendía a nadie" y tenía sólo el objetivo de "arrancar unas risas".