RIO DE JANEIRO.- Once personas murieron por balas perdidas en el estado de Rio de Janeiro en el primer semestre de 2010, casi tres veces más respecto de igual lapso de 2009, informó el miércoles el Instituto de Seguridad Pública (ISP).
No obstante, el número de casos cayó 18,4% en el mismo período.
Según las estadísticas del "Informe Temático de Bala Perdida" del ISP, entre enero y junio del presente año, once personas murieron por balas perdidas en diversos incidentes, contra cuatro de igual período de 2009.
Al mismo tiempo se contabilizaron 84 de estos incidentes, 73 de ellos no mortales, mientras en 2009 se registraron 103 casos, 99 de los cuales sin muertos.
El informe se conoce al día siguiente de un intenso tiroteo entre policías y narcotraficantes en una favela cercana al puerto de Rio de Janeiro (centro) que dejó una mujer herida por bala perdida y que un joven fuera alcanzado en su cabeza en Realengo (zona oeste).
Menos de un mes atrás un niño de 13 años murió por bala perdida cuando acompañaba a su abuela a un hospital público en Duque de Caxias (suburbio norte).
La violencia urbana es un problema endémico en Rio donde casi dos millones de personas viven en unas mil favelas, muchas en áreas turísticas.
En 2007 el gobierno ordenó guerra sin tregua al crimen, principalmente con operativos policiales contra el narcotráfico en las favelas, y pretende reforzar su acción teniendo en cuenta que en 2014 la ciudad será una de las sedes del Mundial de Fútbol y en 2016 organizadora de los Juegos Olímpicos.