La Protección Civil ya recomendó a todos los trabajadores implicados en las tareas de limpieza para que cambien cada dos horas sus mascarillas protectoras.
EFEBUDAPEST.- Varios empleados de la empresa que causó el vertido tóxico en Hungría fueron amenazados con el despido para que no denunciaran el mal estado de la balsa de acumulación de lodos contaminantes, donde se abrió una brecha el pasado día 4.
Según informó hoy el diario Népszabadság en su edición digital, los testimonios de esos trabajadores de la metalúrgica señalan que Zoltán Bakonyi, el ex director de la firma, disponía de informaciones sobre filtraciones en la pared que se acabó rompiendo.
El periódico agregó, Bakonyi “se ocupó más de crear miedo en los que se preocupaban por el estado del dique” que por hacer algo contra las fugas en las paredes del mismo.
Bakonyi fue detenido el lunes bajo la acusación de negligencia. La empresa ha sido intervenida por el Estado.
La ONG WWF-Adena ya denunció hace varios días que una serie de fotografía tomadas el pasado junio permiten ver ya que existían filtraciones de lodo rojo en el muro de la balsa.
Asimismo los investigadores de la Oficina Central de Investigaciones (NNI) ya cuentan con más de 20 testimonios contra Bakonyi, principalmente de parte de otros altos y medianos directivos de la empresa, señala el diario.
Con la muerte hoy de uno de los heridos hospitalizados, el vertido tóxico de la pasada semana se ha cobrado ya nueve vidas, ha causado heridas a 150 personas y ha provocado el mayor desastre medioambiental de la historia de Hungría.