RÍO DE JANEIRO.- Cinco personas de la misma familia fueron condenadas a penas de entre nueve y 10 años y medio de prisión por su responsabilidad en la explosión de una fábrica de pirotecnia que dejó 64 muertos en Brasil en 1988.
La sentencia por homicidio fue anunciada en la madrugada de hoy en la ciudad de Salvador, tras trece horas de audiencia en el Segundo Juzgado Criminal del Tribunal de Justicia de Bahía.
Otros tres de los ocho acusados de la tragedia, en la que murieron dos niños, fueron absueltos.
La explosión sacó a la luz el funcionamiento de una fábrica clandestina de fuegos de artificio en la pequeña localidad de San Antonio de Jesús (estado de Bahía) y las terribles condiciones desprovistas de seguridad en las que trabajaban sus aproximadamente cien empleados, varios de los cuales eran menores de edad.
En el momento de la explosión, ocurrida el 11 de diciembre de 1988, la fábrica almacenaba cerca de 1,5 toneladas de fuegos.
El propietario del terreno y de la nave que servía de fábrica,
Osvaldo Prazeres Bastos, fue condenado a 9 años de
prisión en lugar de a la pena máxima debido a que
la ley brasileña concede beneficios a los reos con
más de 70 años de edad.Los otros cuatro condenados
son sus hijos, Mario Fróes Prazeres Bastos, Ana
Claudia Almeida Reis Bastos, Helenice Froes Bastos
Lyrio y Adriana Fróes Bastos de Cerqueira, cada
uno de los cuales tendrá que cumplir una pena de
10 años y 6 meses de prisión.El retraso en la
investigación llevó a que la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos de la
Organización de los Estados Americanos (OEA)
aceptara una denuncia por omisión contra el Estado
brasileño en 2002.El caso fue elevado por el
Movimiento 11 de Diciembre, integrado por
familiares de las víctimas, y por el Foro de
Derechos Humanos de Santo Antonio de Jesús.
EFEcm/ir|K:TRI:JUSTICIA-INTERIOR-SUCESOS,JUSTICIA|
|Q:JEI:es:02004000:Justicia e interior:Sentencias|
|P:BRA| 10/21/13-39/10