Justicia acoge querella contra arzobispo de Bélgica por "manifestaciones homófobas"

BRUSELAS.- El arzobispo André-Joseph Leónard, jefe de la Iglesia Católica belga, podría tener que comparecer ante la Justicia por sus polémicas afirmaciones acerca del Sida y la homosexualidad.

Según el rotativo "De Standaard", el abogado Jean-Marie de Meester acaba de presentar ante un juez de instrucción en Brujas, una querella -que fue acogida- contra el prelado por "manifestaciones homófobas y discriminatorias".

De Meester, que pertenece al Partido Socialista de Flandes (Sp.a), presentó hace dos semanas una acción judicial en tal sentido ante el Centro para la Igualdad de Oportunidades y para la lucha contra el Racismo de Flandes, una institución oficial a nivel federal belga.

"La epidemia de Sida es una especie de justicia inmanente. Cuando el amor humano se pervierte, al final, éste se acaba vengando", afirma el religioso en el libro "Conversaciones con el arzobispo Léonard", que se publicó, en su versión original francesa, en 2006 (ediciones "Mols") y que hace tres semanas salió a la venta en Flandes, la comunidad del norte de Bélgica, en medio de un gran revuelo.

Lo grave de la situación, afirma la prensa flamenca, es que cuatro años después del escándalo que provocaron esas declaraciones en su primera versión en francés, el ahora máximo responsable de la Iglesia Católica belga no se ha retractado ni ha cambiado "ni un punto ni una coma", según afirma el periódico flamenco "De Morgen".

En la primera versión del libro, con una tirada de 3.000 ejemplares, Léonard, entonces obispo de Namur, aseguraba que el Sida no es un castigo divino, sino una especie de "justicia inmanente", por haber dañado el "equilibrio natural de las cosas".

La enfermedad es, en su opinión, una especie de "venganza de la naturaleza" por haber "mantenido relaciones sexuales de alto riesgo fuera del matrimonio", explicaba el religioso.

"Tras consultar con varios juristas, decidí presentar la demanda contra monseñor Leónard por supuesta violación de la legislación belga contra la discriminación, debido a sus manifestaciones abiertamente homófobas", aseveró el abogado.

La curia belga emitió un comunicado urgente en el cual, a pesar de la lluvia de críticas que sigue cayendo sobre el purpurado, expresó "su total apoyo" a André-Joseph Leónard y, por extensión, da a entender que la cúpula católica del país suscribe las opiniones vertidas en el libro, que habla sobre la carrera del religioso.