La intervención policial en las favelas ha dejado 30 muertos en cinco días.
APBRASILIA.- La Presidenta electa de Brasil, Dilma Rousseff, expresó su solidaridad con la población de Río de Janeiro y dio su apoyo a las autoridades locales en la lucha contra la violencia desatada por el tráfico de drogas, y que ha dejado 30 muertos en cinco días.
Según un comunicado emitido este viernes por el equipo de transición, Rousseff se contactó con el gobernador de Río, Sergio Cabral, para expresarle también su "confianza en las medidas que están siendo adoptadas" y que calificó de "enérgicas".
También aseguró que una vez que asuma el poder el 1 de enero continuará prestando apoyo al estado de Río de Janeiro, con el fin de derrotar al crimen organizado.
La seguridad pública en Brasil es responsabilidad de los estados, aunque el gobierno de Luiz Inacio Lula da Silva está colaborando en esa tarea, al autorizar contribuciones de las Fuerzas Armadas mediante efectivos y equipamiento.
En Río, la ciudad que será subsede en el Mundial 2014 y que albergará los Juegos Olímpicos de 2016, las autoridades intentan ganarle a los delincuentes el territorio que han conquistado en las grandes favelas.
