WASHINGTON.- El Presidente de Yemen, Ali Abdulá Saleh, ofreció a EE.UU. en 2009 acceso total a su territorio para que lanzara ataques unilaterales contra Al Qaeda, al tiempo que negaba públicamente toda colaboración antiterrorista con Washington, según revelan documentos de WikiLeaks publicados hoy.
Los cables diplomáticos obtenidos por la organización, y que hoy salen a la luz en los diarios The New York Times y The Guardian, desvelan el peso creciente que ha alcanzado el país árabe en la estrategia antiterrorista de EEU.UU. en la península arábiga.
"He dado una puerta abierta contra el terrorismo, así que ya no soy responsable", dijo Saleh al viceconsejero de seguridad nacional del Presidente Barack Obama, John Brennan, en septiembre de 2009, según un cable diplomático que recoge The Guardian.
Saleh contradecía así el discurso público de su Gobierno, que asegura que su propio Ejército es el único responsable por las operaciones antiterroristas, en un acuerdo secreto que permitía a EE.UU. utilizar su suelo como lanzadera de misiles contra el brazo de Al Qaeda en la Península Arábiga.
"Yemen ha insistido en que debe mantener el 'estatus quo' en lo que se refiere a la negación oficial de la implicación de EE.UU.", escribió a Washington en diciembre de 2009 el embajador Stephen Seche, quien aseguró que "Saleh quiere que las operaciones continúen sin descanso hasta que erradiquemos esta enfermedad".
Los cables recogen también un encuentro entre Saleh y el jefe del Mando Conjunto Central del Ejército estadounidense, el general David Petraeus, en el que el mandatario yemení admite que ha mentido a su población sobre la autoría de los ataques.
"Seguiremos diciendo que las bombas son nuestras, no vuestras", dijo Saleh a Petraeus el 2 de enero de este año.En el encuentro, el general comunicó al dirigente que había solicitado 150 millones de dólares en asistencia de seguridad al país para 2010, más del doble de los 67 millones otorgados en 2009.
Los documentos revelan, sin embargo, que Saleh exigía que se acelerase la concesión de "apoyo adicional", con más helicópteros y vehículos adaptados.