LONDRES.- El temporal de nieve y frío polar que afecta al norte y centro de Europa desde hace más de una semana, provocó temores por un desabastecimiento de alimentos y combustible en Gran Bretaña, además de complicaciones en la red de transporte del Viejo Continente, con demoras y cancelaciones de vuelos y redes ferroviarias.
Ante esta situación, la ministra para el Medio Ambiente británica, Caroline Spelman, buscó llevar calma a la población, al indicar que no hay problemas de abastecimiento de alimentos.
"No hay razón para entrar en pánico y salir a comprar comida para llenar las bodegas no ayudará a la situación", afirmó la funcionaria.
Sin embargo, las principales cadenas de supermercados del país, entre ellas Tesco y Sainsburys, reportaron escasez de productos básicos, principalmente leche, pan, verduras y frutas, como consecuencia de la dificultad de los camiones para trasladarse por las rutas del país y un aumento en la demanda.
Según trascendió, algunas tiendas ya implementaban sistemas para racionar los alimentos a los compradores.
Por su parte, las gasolineras advirtieron que hay “escasez crítica” de combustible, debido a que cientos de camiones-tanque quedaron varados en autopistas y rutas por las nevadas de los últimos días en el país.