ROMA.- El Presidente italiano, Giorgio Napolitano, pidió este lunes un "salto de calidad" en la política nacional que permita mantener la estabilidad del país en el contexto actual y descartó, de momento, la posibilidad de celebrar elecciones anticipadas.
Napolitano se refirió así a la difícil situación política que vive el país tras las dos mociones de censura que superó el Ejecutivo de Silvio Berlusconi en la Cámara de los Diputados el pasado martes por tan sólo tres votos.
"Es decisivo en Italia un salto de calidad de la política. Decisivo para la estabilidad y la continuidad de la vida institucional y para mantener el sistema italiano en un contexto europeo marcado por las tensiones", dijo Napolitano durante su discurso de Navidad ante los principales cargos del Estado.
En este contexto, descartó, de momento, la celebración de elecciones anticipadas, como pidió el pasado sábado el líder de la Liga Norte y único socio de Berlusconi en el Gobierno, Umberto Bossi.
"Seguiré pidiendo la continuidad de la vida institucional y de una legislatura a la que aún le quedan más de dos años, siempre que exista la perspectiva de una acción de gobierno eficaz y de un desarrollo productivo de la actividad de las Cámaras", remarcó.
Estas declaraciones fueron bien acogidas por Berlusconi, quien aseguró al término del discurso que las palabras de Napolitano "son una lanza en favor de la continuidad y ello va en sintonía con lo que nosotros consideramos que es el interés del país".
Berlusconi volvió a hablar también del enfrentamiento con su ex aliado y líder del grupo parlamentario Futuro y Libertad (FLI), Gianfranco Fini, al que acusó de contar con el apoyo de la magistratura y de haber "bloqueado" la controvertida ley sobre escuchas propuesta por el Gobierno.
Así lo manifestó Berlusconi durante un almuerzo con varios diputados europeos, que recogen los medios de comunicación italianos.
Fini respondió a estas palabras diciendo que se trata de uno de las habituales "chascarrillos" del "vasto repertorio" de Berlusconi.
El Jefe del Ejecutivo afirmó, además, que Fini se encuentra en un "momento de dificultad" ya que su movimiento registra una "caída en el consenso", y reiteró la posibilidad de que varios parlamentarios que no forman parte del Gobierno apoyen al Ejecutivo en próximas decisiones.
Además, el Primer Ministro italiano adelantó la posibilidad de cambiar el nombre a su actual partido, el Pueblo de la Libertad (PDL), fundado con Fini, para evitar posibles contenciosos con su ex aliado.
"Es un nombre que no ha calado entre la gente hasta el punto de que muchos lo llaman 'PDL'. Además, existe el riesgo de entrar en enfrentamientos con FLI, por lo que debería cambiarse", dijo Berlusconi.