LOS ÁNGELES.- Un prestigioso hospital de Phoenix (Arizona) se quedó sin su estatuto de hospital católico al sacárselo las autoridades religiosas por haber practicado un aborto terapéutico para salvar la vida de una madre.
El hospital St. Joseph no podrá ser más calificado como católico y allí no se podrán celebrar más misas, anunció Thomas J. Olmsted, obispo de Phoenix.
"El bebé estaba sano y el embarazo no presentaba ningún problema", aseguró el obispo en un comunicado.
"La madre era la que estaba enferma y debía ser atendida. Pero en lugar de tratar su enfermedad, los médicos y el comité de ética del hospital resolvieron que el bebé sano, de 11 semanas, debía ser muerto. Es contrario a las enseñanzas de la Iglesia", añadió el prelado.
"Aunque estemos profundamente decepcionados, seguiremos compliendo con nuestra misión", respondió la presidenta del hospital, Linda Hunt, en otro comunicado. "Nuestros procedimientos y nuestra política no cambiarán", dijo.
Hunt defiende con vigor la decisión del hospital de practicar un aborto para salvar la vida de la madre.