WASHINGTON.- El portavoz de la Casa Blanca, Robert Gibbs, reconoció que "llevará un tiempo" cerrar la cárcel ubicada en la base militar de Guantánamo, en Cuba, dilatando aún más el plazo que el Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, fijó apenas asumió su cargo en 2009.
"Ciertamente, no se va a cerrar el próximo mes. Llevará un tiempo", dijo Gibbs, agregando que la clausura de esta prisión "dependerá en parte de la voluntad de los republicanos de trabajar con la administración en este tema", acotó.
De esta forma, el portavoz de la presidencia se refirió a la complicada situación en la que quedará el bloque oficialista en el Congreso a partir de enero, cuando los republicanos obtengan el control de la Cámara de Representantes y aumentarán su presencia en el Senado, como consecuencia de los malos resultados obtenidos por los demócratas en las legislativas del pasado 2 de noviembre, precisó Europa Press.
En la misma línea, Gibbs admitió que existen "problemas legales" para impulsar la propuesta realizada por el gobierno con el fin de propiciar la adhesión de los presos de Guantánamo a la jurisdicción civil en vez de la militar, en referencia a la fuerte oposición que ha encontrado en las filas republicanas en esta cuestión.
Finalmente, el vocero rebajó las expectativas sobre el futuro cierre de la prisión, cuya fecha ha sido pospuesta de forma indefinida, a pesar de que Obama reiteró su deseo de cumplir con su promesa durante el discurso pronunciado el pasado miércoles, antes de comenzar su retiro navideño en el estado de Hawai.