LA PAZ.- La muerte de al menos tres personas desde el domingo debido a las lluvias torrenciales y la crecida de los ríos de Bolivia provocó la alarma en el país andino, cuyo gobierno declaró este martes emergencia nacional para dar socorro a unas 6.100 familias damnificadas.
El ministro de Defensa, Rubén Saavedra, afirmó que "todos los organismos de asistencia del Estado han sido movilizados a los lugares de los desastres para atender a la población afectada".
A esto agregó que el gobierno de Evo Morales destinó 20 millones de dólares para trabajos de emergencia y asistencia social a los damnificados por los desbordamientos de ríos de la cuenca amazónica y del Plata.
Debido al mal tiempo, un campesino murió ahogado el lunes en el trópico de Cochabamba, en el centro del país, mientras que dos ciudadanos argentinos fallecieron por la crecida del río Bermejo que es límite natural en la frontera sur de Bolivia con Argentina.
Además, en el departamento de Chuquisaca al menos 28 personas murieron en enero cuando un autobús y otro vehículo fueron derribados y arrastrados por las aguas.
La principal carretera que une la parte occidental de Bolivia con la oriental fue cerrada durante al menos tres días después de que se produjeran desplomes en tres sectores de la carretera asfaltada entre Cochabamba-Santa Cruz.
El alcalde de Villa Tunari, Feliciano Mamani, indicó que unos siete pueblos del trópico del departamento de Cochabamba están cubiertos de agua tras las lluvias torrenciales. "Nunca había visto tanta agua. El río 24 se desbordó y está cerca de partir en dos al pueblo de Villa 14 de Septiembre. Pero otros siete pueblos están cubiertos de agua. Hay un muerto y unas 2.500 familias damnificadas", relató a una estación radial.
Mamami agregó que existe peligro de derrumbe del puente de la región de Cristal Mayu, y otro por desborde del río Espíritu Santo. En tanto, el viceministro de Desarrollo Rural y Agropecuario, Víctor Hugo Vásquez, precisó que 995 hectáreas de cultivos de trigo, yuca, banano, cítricos, hortalizas, cereales y forraje se perdieron a causa de las inundaciones en los departamentos de La Paz, Cochabamba, Oruro y Chuquisaca.
El Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología de Bolivia (Senamhi), ratificó que las lluvias cesarán en la segunda quicena de marzo, y serán más intensas en el norte de La Paz, la amazonía boliviana, y el trópico de Cochabamba."Las lluvias este año subieron en un 30 y 40 por ciento con relación a años anteriores", puntualizó la técnica del Senamhi, Marisol Portugal.
