BEIJING.- China, uno de los pocos países aliados de Corea del Norte, presentó este lunes sus "profundas condolencias" por la muerte del dirigente norcoreano Kim Jong-il.
Según anunció la agencia oficial "China Nueva", la influencia económica china sobre su vecino norcoreano, cuya economía se ha degradado considerablemente, aumentó desde que Corea del Sur y los países occidentales interrumpieron su ayuda ante la amenaza nuclear de Corea del Norte.
China es un vecino e importante aliado de este aislado Estado estalinista, cuyos medios oficiales anunciaron el lunes que su líder había muerto de un ataque cardíaco a los 69 años y que su hijo menor, Kim Jong-Un, lo sucedería.
Varios analistas señalaron que su muerte preocupa a los dirigentes chinos, que están obsesionados con la estabilidad y probablemente temen que Kim Jong-Un no tenga suficiente tiempo para controlar al gobierno y a los militares.
Más de 21.700 norcoreanos escaparon de su empobrecido país, afectado por una hambruna, desde la guerra de Corea (1950-1953), en su gran mayoría durante los últimos años. Primero fueron a China a pie, antes de seguir hacia un tercer país. Beijing teme que un colapso del régimen norcoreano inunde a su país de refugiados.
