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Santiago: Viernes 26 de abril del 2024 | Actualizado 16:04
LA HABANA.- La Presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, finalizó hoy su primer viaje oficial a Cuba y partió rumbo a Haití para reunirse con el Mandatario de ese país, Michel Martelly.
Rousseff voló hacia Puerto Príncipe desde el terminal aéreo José Martí de La Habana tras una estancia de menos de 48 horas en Cuba, informó una fuente diplomática brasileña.
La prensa extranjera acreditada en la isla no tuvo acceso a la despedida de la Mandataria como se había previsto inicialmente, después de que la cobertura informativa de ese acto fuera cancelada ayer martes.
Durante su visita, la jefa de Estado fue recibida en el Palacio de la Revolución por el presidente Raúl Castro y también se entrevistó con el exgobernante Fidel Castro.
Rousseff visitó junto al general Raúl Castro los trabajos de ampliación del puerto de Mariel, obra efectuada por una empresa brasileña con un presupuesto que ronda los 900 millones de dólares, de los que Brasil aporta 640 millones.
Además, ambos gobernantes presidieron la firma de 13 acuerdos bilaterales que incluyen proyectos de cooperación científica, técnica y tecnológica, en áreas como la industria siderúrgico-mecánica y la geología.
La visita de Rousseff, con una agenda de acento económico y comercial, tuvo como telón de fondo la situación de los derechos humanos en la isla.
En declaraciones a periodistas en La Habana, la Presidenta se mostró partidaria de hablar de los derechos humanos pero "en todo el mundo", incluido Brasil y sin olvidar a Estados Unidos y la base de Guantánamo, al tiempo que reclamó un enfoque "multilateral" de la cuestión.
Rousseff abogó por una asociación "estratégica y duradera" con Cuba la isla y se comprometió con su desarrollo económico.
Su agenda en Haití para las próximas horas prevé una reunión con el presidente Martelly, así como una visita al contingente militar brasileño, que lidera la misión de la ONU (Minustah) en esa nación caribeña.
