En el video, quien sería Mohamed Merah saluda a la cámara desde un auto.
Reuters
PARÍS.- Mientras cadenas de TV francesas difunden la imagen de un video que supuestamente muestra a
Mohamed Merah, el principal sospechoso de los siete asesinatos en Toulouse, la figura del joven que se ha definido como "yihadista de Al Qaeda" todavía muestra perfiles confusos.
Las imágenes del video muestran a un hombre joven saludando con entusiasmo desde un automóvil.
Merah, de 23 años, es un francés de origen argelino que había estado en Pakistán y en Afganistán. Tiene antecedentes penales, según la policía.
Nació el 10 de octubre de 1988 en Toulouse, tiene "relaciones con personas que se reclaman del salafismo y del yihadismo" y ha "realizado dos viajes, uno a Afganistán, el otro a Pakistán".
El modus operandi de este pistolero en moto, quien asesinó a sangre fría en ocho días a tres militares y a un profesor y tres niños judíos, remitía desde el inicio de la investigación a una persona entrenada y acostumbrada al manejo de las armas.
Merah habría intentado en dos ocasiones incorporarse a las Fuerzas Armadas francesas, primero el Ejército en 2008 y dos años después en la Legión Extranjera. Fue rechazado.
Testimonios citados el martes por el fiscal de París, François Molins, le describen como un hombre con "una silueta más bien fina, de más o menos 1,70".
Rechaza al Ejército pero trató de entrar a élEl presunto culpable explicó a los negociadores, según reveló la policía, que había querido vengar la muerte de niños palestinos al atacar el 19 de marzo una escuela judía.
Fue menos explícito en el caso de los militares pero dijo que el hecho de que algunos pudieran ser de confesión musulmana o parecieran de origen norafricano no tenía nada que ver en su decisión y que quería atacar al ejército francés debido a "sus intervenciones en el exterior".
El sospechoso era vigilado "desde hace varios años por la DCRI (Dirección Central de la Inteligencia Interior) y sus agentes de Toulouse", según el ministerio del Interior de Francia.
Los datos con los que contaba las autoridades incluían "varias infracciones de derecho común, incluidas algunas con violencia" en territorio galo, las que sumaban 18 en total, según una fuente policial.
Incluso habría sido detenido a finales de 2010, en Kandahar, en Afganistán por delitos de derecho común.
No obstante estos antecedentes, el individuo habría podido cometer al menos dos series de asesinatos sin que las autoridades policiales hubieran detectado sus movimientos o sus intenciones.