Quieres ver tu clima local?
Mostrar
Santiago: Viernes 26 de abril del 2024 | Actualizado 06:43
PYONGYANG.- Mientras el ruido de cazas de combate sacudía la capital norcoreana, Pyonyang, las fuerzas armadas de Japón y Filipinas se encontraban en estado de alerta máxima este jueves, con el comienzo de la "ventana" de tiempo para el lanzamiento de un cohete anunciado por el gobierno de Corea del Norte.
El despliegue aéreo coincidió con el fin de la conferencia del Partido de los Trabajadores (comunista) de ese país en la que el nuevo líder, Kim Jong-un, fue "electo" primer secretario de la colectividad que rige con puño de hierro la vida de ese país.
El despegue del cohete Unha-3, que supuestamente porta un satélite, ha sido condenado por la comunidad internacional, que teme que la operación encubra la prueba de un misil balístico de largo alcance, en violación de resoluciones de la ONU.
Tokio y otras ciudades de Japón permanecen bajo la protección de un "paraguas" formado por proyectiles antimisil "Patriot", de fabricación estadounidense. Buques de las Fuerzas de Autodefensa niponas dotados con sistemas de detección Aegis mantienen constantes patrullas.
El plazo previsto por el régimen norcoreano para concretar la operación se extiende hasta el 16 de abril. Las autoridades de ese país alegan que su objetivo es colocar en órbita un aparato espacial pacífico destinado a la observación de la Tierra.
Observadores no prevén que el despegue se produzca este jueves, debido a que el cohete no ha dejado su plataforma de lanzamiento con la suficiente anticipación, según la agencia de noticias sudcoreana Yonhap.
"Las posibilidades de que el cohete sea lanzado hoy (jueves) son escasas", dijo un responsable del gobierno de Corea del Sur, citado por la agencia.
Estados Unidos y sus aliados surcoreanos y japoneses acusan a Pyongyang de preparar en realidad un ensayo de misil balístico. Rusia también condenó el proyecto, mientras que China, único aliado de Corea del Norte, manifestó su preocupación e hizo un llamado a la moderación.
Advertencia a civiles
El cohete será lanzado desde la base de Tongchang-ri, en el extremo noroeste de Corea del Norte. Su primera etapa debería caer en el mar Amarillo, al oeste de la península coreana, y la segunda al este de Filipinas. También podría sobrevolar algunas de las islas de Okinawa, al sur de Japón.
"Estamos preparados para cualquier eventualidad", declaró el Primer Ministro japonés, Yoshihiko Noda.
Las autoridades aconsejado a los habitantes del país no permanecer fuera de sus casas en los minutos siguientes al disparo norcoreano y recomendaron no acercarse a los posibles restos que caigan en tierra, debido a su peligrosidad.
El gobierno filipino, en tanto, ordenó a las compañías aéreas evitar la zona que podría verse afectada por la caída de restos del misil, lo que afecta las rutas de una veintena de vuelos.
