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Vinculan a comandante de la OTAN en Afganistán a escándalo de la CIA

Un alta fuente del Pentágono señaló que el jefe de las fuerzas de la coalición internacional habría enviado mensajes inapropiados a la mujer que destapó el caso de infidelidad de David Petraeus.

13 de Noviembre de 2012 | 09:13 | AFP
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general estadounidense y comandante de las fuerzas de la OTAN y los Estados Unidos en Afganistán, John Allen.

EFE

WASHINGTON.- Nuevas aristas aparecen en el escándalo que motivó la renuncia del director de la CIA David Petraeus, con la investigación iniciada contra el jefe de las fuerzas de la OTAN en Afganistán, John Allen, por haber enviado mensajes "inapropiados" a la mujer que destapó el caso con sus denuncias.


Según un alto responsable del Pentágono, que pidió no ser identificado, el general John Allen es objeto de una pesquisa luego de que la Oficina Federal de Investigación (FBI) descubriera unos 30.000 correos electrónicos entre él y Jill Kelley, figura clave en el escándalo que costó el cargo a Petraeus, renombrado general y jefe de los servicios de inteligencia de Estados Unidos.


Petraeus renunció abruptamente la semana pasada, admitiendo una relación extramatrimonial con su biógrafa Paula Broadwell.


El funcionario dijo a los periodistas que viajan con el secretario de Defensa, Leon Panetta, que existe una "clara posibilidad" de que los correos electrónicos de Allen estén vinculados al caso Petraeus.


La información constituye un nuevo desarrollo en el escándalo que estalló tras la reelección del Presidente Barack Obama y en medio de las investigaciones por el desempeño de la CIA tras el ataque al consulado estadounidense en Bengasi (este de Libia), el pasado 11 de septiembre, en el que murió el embajador y otros tres funcionarios.


Kelley, una mujer de 37 años de Tampa, Florida, había denunciado al FBI una serie de correos electrónicos amenazantes que recibió este año y que luego se descubrió provenían de Broadwell. El FBI posteriormente halló mensajes entre Broadwell y Petraeus que revelaban su relación.


Steve Boylan, amigo cercano y exportavoz de Petraeus, aseguró el lunes a la AFP que el general lamentaba profundamente su relación extraconyugal, que comenzó dos meses después de que asumiera la jefatura de la CIA en septiembre de 2011. El romance terminó hace unos cuatro meses, dijo.


Agentes del FBI registraron en la noche del lunes la casa de Broadwell, en Charlotte (Carolina del Norte, sudeste), de acuerdo con la televisión WFMY, filial de CBS.


"Cerca de una docena" de agentes cargaron cajas y tomaron fotografías del interior de la vivienda de la biógrafa y presunta amante de Petraeus, informó el canal.


Una periodista de la televisión local WCMC tuiteó que agentes del FBI comenzaron a registrar la casa de Broadwell a las 20:40 horas (22:40 hora de Chile del lunes) y que llevaban al menos dos horas de inspección.


"Una docena (de agentes) allí, con bolsas/cajas, tomando fotos", escribió Dianne Gallagher en Twitter.


"Muchos federales & vehículos de prensa estacionados en Lexington Ave. en Dilworth (donde está el hogar de Broadwell) coches ya no pueden acceder", señaló la reportera en la red social.


Broadwell, que escribió una biografía autorizada del general de cuatro estrellas retirado, no ha sido vista desde que Petraeus dimitió y estalló el escándalo.


Un vecino de Broadwell, Ed Williams, afirmó a WCNC que ella, su esposo Scott y sus dos hijos se encuentran en un lugar "desconocido" pero que están "bien".


Steve Boylan, amigo cercano y ex portavoz de Petraeus, aseguró el lunes a la AFP que el general lamenta profundamente su relación extraconyugal, que comenzó dos meses después de que asumiera el cargo de jefe de la CIA en septiembre de 2011. El romance terminó hace unos cuatro meses, dijo.


El escándalo puso en alerta a la clase política estadounidense, que teme que la seguridad nacional del país esté en peligro debido a que Broadwell tuvo acceso a información clasificada.


En tanto, un agente del FBI que trabajó en el caso Petraeus es objeto de una investigación interna por su comportamiento, afirmó la noche del lunes The Wall Street Journal.


El agente, cuyo nombre no fue revelado, envió fotos de sí mismo con el torso desnudo a Jill Kelley.


Fuentes anónimas citadas por el diario indicaron que los superiores del agente comenzaron a plantearse dudas al ver que éste se mostraba cada vez más "obsesionado" por el caso que estaba investigando.


Fue entonces cuando descubrieron los correos electrónicos enviados por el agente y sus fotos con el torso desnudo.

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