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Santiago: Viernes 26 de abril del 2024 | Actualizado 01:52
BAMAKO.- El jefe de gobierno de Mali, Cheick Modibo Diarra, fue obligado a dimitir por haber cerrado alianzas políticas que no aprueban otros miembros del Ejecutivo y del Ejército.
Diarra comenzó a mostrar sus "intenciones políticas" al relacionarse con grupos que lo apoyaban, "sin consultar ni con el presidente interino, Dioncounda Traoré, ni con los militares", afirmó el portavoz militar Modibo Nama Traore, al tiempo que rechazó que el proceso sea un golpe de Estado.
El ahora ex Mandatario presentó su renuncia y la de todo su gabinete en un discurso transmitido por la televisión nacional. Según los militares, el dirigente fue liberado tras firmar la dimisión.
"Esto no es un golpe. El ex Primer Ministro está seguro y el nuevo (Premier) se anunciará al final del día", señaló a dpa el coronel Diaran Kone.
Dirigentes cercanos al Presidente Traoré habían criticado la reestructuración del gabinete que hizo Diarra en agosto. Fuentes que pidieron permanecer en el anonimato aseguraron que cuando el Primer Ministro nombró ministros a algunos asesores, se rompió su relación con el jefe de Estado.
Los militares negaron asimismo los reportes iniciales acerca de que el Premier había sido destituido por órdenes del capitán Amadou Haya Sanogo, el mismo que en marzo estuvo involucrado en un golpe militar que tuvo como consecuencia que radicales islamistas y rebeldes separatistas tuareg tomaran bajo su control el norte del país. Según estas versiones había sido detenido por apoyar una misión internacional de soldados contra los islamistas.
El capitán Sanogo lideró un golpe que destituyó al Presidente Amadou Toumani Touré en marzo, lo que fue aprovechado por los rebeldes ligados a Al Qaeda para hacerse con el control del norte del país.
En medio de fuertes presiones internacionales, Sanogo entregó el poder a un gobierno civil de transición encabezado por el presidente Dioncounda Traoré dos semanas después, pero los observadores señalan que sigue tras los hilos del poder en la capital.
"Yo, Cheick Modibo Diarra, renuncio con todo mi gobierno", declaró el primer ministro en un breve mensaje, sin dar más explicaciones. "Pido disculpas a todos los habitantes de Mali que sufren (...) por esta crisis", añadió.
Previamente, Diarra, en el cargo desde abril pasado, había sido arrestado en su residencia por unos 15 soldados.
Francia criticó la forma en que se produjeron los hechos. "La vieja junta tiene que parar de intervenir en los asuntos políticos del país", señaló el portavoz del Ministerio del Exterior Philippe Lalliot, quien subrayó que condenan "las circunstancias", y no tanto el motivo, por el que se produjo la renuncia del gobierno.
Por su parte, la UE aseguró que seguirá adelante con los preparativos para su misión de formación militar, aunque siguiendo de cerca "cuál es la actitud de los militares y si se siguen inmiscuyendo en la vida política o no", comentó en Bruselas un portavoz de la responsable de Política Exterior, Catherine Ashton.
A pedido del gobierno de Bamako, la comunidad de Estados africanos Ecowas está preparando una misión de 5.000 soldados para expulsar a los islamistas del norte de Mali. También la Unión Europea (UE) se ha comprometido a apoyar militarmente al país con el envío de entre 200 y 250 oficiales de formación a la capital.
Diarra era un fuerte defensor de la intervención contra los separatistas e islamistas. Sin embargo, algunos militares, como Sanogo, solamente quieren el apoyo internacional con armas, formación y logística, pero bajo control nacional.
La intervención debe ser aprobada aún por el Consejo de Seguridad de la ONU. Representantes de Naciones Unidas denuncian que en el norte se extienden el caos y las violaciones a los derechos humanos. Casi 350.000 personas han huido de la zona en los últimos meses, de ellas 140.000 a países vecinos.
