BEIRUT.- Unos 30 cadáveres con señales de tortura fueron hallados ayer por la noche en un barrio del norte de Damasco, donde habitualmente se registran enfrentamientos entre el ejército regular y los rebeldes, informó este lunes el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
"Se hallaron unos 30 cadáveres en el barrio de Barzé. Tenían señales de torturas y hasta ahora no han podido ser identificados", dijo esta ONG con sede en Londres que recaba información de una amplia red de militantes y médicos en Siria.
Por su parte, la red de militantes de la Comisión General de la Revolución Siria (CGRS) aseguró que se trata de medio centenar de cuerpos, "cuyas cabezas han sido cortadas y desfiguradas a tal punto que es imposible identificarlas".
La CGRS acusó a los "shabihas", las milicias del régimen, de estar detrás de estas "ejecuciones sumarias".
Por el momento resulta imposible confirmar esta información con fuentes independientes dada la gravedad de la violencia que sacude al país y las restricciones que las autoridades imponen a la prensa internacional.
Este hallazgo se produjo el mismo día en que el emisario internacional para Siria, Lakhdar Brahimi, aseguró que tiene un plan susceptible de ser aceptado por la comunidad internacional para poner fin al conflicto que ha dejado más de 45.000 muertos en 21 meses, según la OSDH.
El domingo, 160 personas perdieron la vida en Siria, de ellas 78 civiles, 41 soldados y 41 rebeldes, según el OSDH.
