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Santiago: Viernes 26 de abril del 2024 | Actualizado 13:50
MADRID.- La Audiencia Nacional española, encargada de hacer las cuentas de la condena que a Ángel Carromero le queda por cumplir en España tras su regreso de Cuba, fijó hoy el 21 de julio de 2016 como el último día de pena del joven político del Partido Popular (PP) de Mariano Rajoy.
Esas cuentas de la pena de Carromero, condenado en Cuba a cuatro años de prisión por homicidio imprudente por el accidente de tránsito en el que en julio murieron los disidentes Oswaldo Payá y Harold Cepero, son un trámite necesario para que las autoridades penitenciarias puedan acordar el tercer grado para él.
Carromero, de 27 años, conducía el automóvil en el que murieron Payá y Cepero. Regresó a España el pasado sábado para pagar en su país el resto de la condena, después de que los gobiernos español y cubano llegaran a un acuerdo para ello en base al convenio bilateral sobre Ejecución de Sentencias Penales, que data de 1998. Desde el sábado se encuentra en la prisión de Segovia.
El tercer grado permitirá -si se aprueba, como todo parece indicar- que el dirigente de Nuevas Generaciones, las juventudes del PP, pueda cumplir su condena en semilibertad, solo durmiendo en prisión o incluso sin tener que acudir a ella, vigilado telemáticamente. La medida, según medios españoles, podría llegar la semana que viene.
Según la Audiencia Nacional, Carromero ha cumplido 159 días de los cuatro años a los que fue condenado. Las cuentas son provisionales, a falta del informe de la fiscalía, según fuentes de la Audiencia Nacional.
Entre los aspectos que las autoridades penitenciarias evalúan para decidir si otorgan el tercer grado a un reo está el delito cometido, la conducta del preso, el arraigo familiar y el hecho de tener o no un trabajo.
El Ayuntamiento de Madrid, donde Carromero es asesor en una junta de distrito, pretende mantenerlo en el cargo, según se supo el miércoles. Tras su arresto en Cuba había sido suspendido provisionalmente de sus funciones, pero la idea ahora es que le sean restituidas, lo que facilita la concesión del tercer grado.
El ministro de Relaciones Exteriores español, José Manuel García-Margallo, comparecerá próximamente y a petición propia en el Congreso de los Diputados para informar sobre el traslado de Carromero a España.
