Estudio revela que el 60% de los políticos cree que los ciudadanos chilenos no se identifican con los partidos

SALAMANCA.- Según un estudio realizado por el Instituto de Iberoamérica de la Universidad española de Salamanca, el 60 % de los políticos de Chile cree que los ciudadanos de su país no se identifican con los partidos.

De acuerdo con el sondeo "Estabilidad o representatividad en Chile", dirigido por Lucía Miranda, de dicha universidad, sobre los motivos de ese divorcio entre partidos políticos y sociedad "el 38,7 por ciento de los políticos entrevistados afirma que los partidos ofrecen pocas instancias de participación ciudadana".

Además, el 36,2 por ciento de los encuestados sostiene que "los partidos no representan las demandas y los intereses de la ciudadanía".

Ante estos datos, Miranda destaca en sus conclusiones que la elite política chilena "parece ser consciente de la necesidad de una reforma en el sistema político que permita una mayor participación y representación de las demandas ciudadanas".

Esta información va unida a la versión de los politólogos de la Universidad de Salamanca Tomás Dosek y Flavia Freindeberg, quienes en un documento recuerdan la teoría de diversos autores según la cual Chile "vive una crisis de representación política".

Los dos profesores pusieron como ejemplo que en las últimas elecciones presidenciales, en 2009, que ganó Sebastián Piñera, surgió la figura de Marco Enríquez-Ominami, que logró el 20,13 por ciento de los votos, "el mejor resultado que ha obtenido un candidato independiente desde el retorno a la democracia".

Dosek y Freindeberg lo atribuyen a esa "crisis" de identidad social, además de "la desconfianza (y agotamiento) hacia las dos grandes coaliciones partidistas".
 
Según Miranda, ante esta ruptura entre la ciudadanía y los partidos políticos "es factible que se ponga en marcha una propuesta legislativa real que considere la modificación del sistema binominal". Sin embargo, "mientras el Congreso esté configurado en su mayoría por diputados de derecha, la aprobación de una reforma de dicho sistema se vislumbra más difícil dado que son estos políticos los menos proclives a un cambio hacia un sistema más proporcional", agregó.