Keiko Fujimori dice que Humala desea que su padre muera en prisión

LIMA.- La ex candidata peruana a la presidencia Keiko Fujimori dijo hoy que el presidente Ollanta Humala "nunca tuvo la intención" de liberar a su padre, el ex mandatario Alberto Fujimori, preso por delitos de lesa humanidad, después de que le negara el indulto humanitario que solicitó su familia.

"Alberto Fujimori saldrá en libertad. Y no en la tumba, como Ollanta Humala y su señora (Nadine Heredia) desean. Usaremos todos los mecanismos legales para lograr esa libertad", manifestó Fujimori para la prensa.

Humala decidió el viernes acoger el informe no vinculante de la Comisión de Gracias Presidenciales, dependiente del Ministerio de Justicia, y responder con un no al pedido de indulto para Fujimori, quien desde 2007 paga en un cuartel policial una condena de 25 años de cárcel como autor mediato de 25 asesinatos y dos secuestros.

"No podemos concebir que el presidente tenga un trato tan inhumano en fondo y forma para con el pedido de indulto. Creo que basta para decir que no hay que tener calidad humana. Nos llama la atención que la Comisión se haya demorado ocho meses para dar una opinión y en menos de tres horas Humala anuncie su decisión", sostuvo Keiko, líder del partido derechista Fuerza Popular (FP), que sigue a su padre.

El hijo menor del ex mandatario, Kenji, también manifestó su indignación por la decisión de Humala, de quien dijo "se lavó las manos" al negarle el indulto a su padre.

"No puedo ocultar el enorme dolor e indignación que siente mi familia por el tremendo daño que le han ocasionado a mi padre. Pero es la decisión de un presidente mutante y sin liderazgo", agregó el parlamentario fujimorista.

De acuerdo a Humala, el informe de la Comisión señala que Fujimori, quien padece de lesiones potencialmente cancerígenas en la boca, hipertensión arterial y depresión aguda, no calificaba para el indulto por no padecer de enfermedades físicas o mentales graves que se vieran complicadas por las condiciones carcelarias.

La decisión del presidente fue acusada por los fujimoristas de obedecer a un cálculo político para favorecer una hipotética candidatura de la primera dama en los comicios de 2016.