Brochero es conocido por viajar en una mula, evangelizando las sierras cordobesas en el centro de Argentina.
ReutersCÓRDOBA.- José Gabriel del Rosario Brochero, el "cura gaucho" argentino, fue beatificado hoy en la provincia de Córdoba por un enviado especial del Papa Francisco.
El sacerdote, que evangelizó a lomo de mula las sierras cordobesas en el centro del país, fue proclamado beato por el cardenal Angelo Amato.
"Concedemos que el venerable siervo José Gabriel del Rosario Brochero, sacerdote diocesano, pastor según el corazón de Cristo, fiel ministro del evangelio, testigo del amor de Cristo a los pobres, sea llamado beato de ahora en adelante", dijo el purpurado al leer el decreto firmado por la máxima autoridad de la Iglesia Católica.
El 20 de diciembre de 2012, Benedicto XVI, hoy papa emérito, firmó el decreto que reconoce el "milagro" atribuido a Brochero por la recuperación sin explicación médica de Nicolás Flores, un niño con pronóstico de "vida vegetativa" y problemas neurológicos severos tras sufrir un grave accidente vial en 2000. El adolescente estuvo en la ceremonia.
El sacerdote Jorge Frigerio, uno de los organizadores de la ceremonia religiosa, estimó que participaron más de 100.000 personas, en tanto que desde el área de turismo provincial estimaron que las presencias fueron cercanas a los 150.000 peregrinos.
Amato valoró la figura de Brochero al decir que "fue un verdadero benefactor de la humanidad" e instó a que "sigamos admirándolo, imitándolo en sus obras materiales y espirituales".
"Brochero dedicó su vida al bien y a la santificación de los fieles, sobre todo de los más necesitados", dijo el cardenal, que añadió que "cada día predicaba la palabra de Dios con homilías bien pensadas, bien articuladas y sin improvisaciones".
Amato destacó que aún con su formación académica en filosofía el "cura gaucho" supo llevar un "lenguaje simple, sencillo y popular para que todos pudiesen entender lo que decía" y lo consideró como un "verdadero comunicador que transmitía alegría y esperanza".
El enviado del Vaticano valoró la "coherencia" entre la vida y la enseñanza evangélica de Brochero, a quien calificó como "una persona de gran riqueza espiritual que comunicaba el amor ilimitado de Dios".
"Se caracterizaba por la inmensa caridad pastoral frente a los más necesitados. Se olvidaba de sí mismo para salir a caballo a visitar a la gente de su pueblo. Lo amaban, lo seguían", indicó Amato, que informó que el papa estableció que la fiesta litúrgica en honor al sacerdote sea el 16 de marzo.
Brochero vivió entre 1840 y 1914. Movilizaba a miles de hombres y mujeres -campesinos, delincuentes, olvidados- a través de caminos inhóspitos para participar de ejercicios espirituales. La ceremonia de hoy terminó con una procesión de cientos de gauchos a caballo.
El sacerdote tuvo un fuerte protagonismo social, al realizar gestiones ante las autoridades que hicieron posible la apertura de caminos, acequias y diques. Enfermó de lepra por compartir el mate junto a pacientes con esta enfermedad, quedó sordo y ciego.
