BUENOS AIRES/CÓRDOBA.- El balance más reciente de los violentos incidentes ocurridos desde este martes en Córdoba asciende a dos personas muertas y un centenar de heridos, de acuerdo a reportes desde esa ciudad del centro de Argentina.
La
primera víctima fatal fue un joven de 20 años quien recibió una herida de bala en el tórax durante un saqueo en el sector de Ciudad Evita, en la periferia de la urbe y falleció en en el hospital San Roque.
El segundo fallecido fue un hombre de 85 años que sufrió una descompensación cuando asaltantes entraron en su vivienda para desvalijarla, de acuerdo a responsables del Hospital de Urgencias local.
De los cien heridos, 11 permanecían en estado reservado este miércoles.
El número de detenidos, en tanto, se elevaba a 52 este miércoles, cuando el
acuerdo firmado este miércoles entre los cerca de 3 mil policías paralizados y el gobierno de la provincia puso a los uniformados de vuelta en las calles, que retornaron a la tranquilidad.
Según las autoridades, los grupos que actuaron durante el acuartelamiento de los agentes eran antisociales organizados.
"No hubo un estallido social. Operaron bandas de delincuentes organizados que aprovecharon la ausencia policial", afirmó el gobernador provincial, José Manuel de la Sota.
Custodia escopeta al hombro
Muchos de los participantes en los atracos registrados a partir de la tarde del martes se movilizaban en motocicletas.
"Recorrí el centro en la noche y vi cómo entraban en los negocios: se llevaban artículos del hogar, de informática, colchones. Iban por la (calle) peatonal con carros; los cargaban en una camioneta en la avenida principal y volvían a seguir robando", contó Angel Stival, un residente local.
"Se veían tipos que cuidaban sus tiendas con escopetas, como en el 'far west' (lejano oeste)", añadió Raúl Dotti, de 55 años, dueño de un local de repuestos de autos y neumáticos situado en el centro de la capital provincial que escapó de la voracidad de los saqueadores.
Los vándalos ingresaron incluso en viviendas particulares y exigían dinero a sus habitantes, según varios testigos. Fue precisamente el caso de la segunda víctima fatal, de acuerdo a testimonios locales.
"Esto no fue un saqueo por pobreza, no ha habido saqueo de alimentos. Acá ha habido presencia delictiva, tiene más viso de situación de delito y saqueos que de un movimiento social por hambre", afirmó Pedro Torres, obispo auxiliar de Córdoba.
Indicios de corrupción
Después de la noche de terror vivida en Córdoba, en medio de saqueos y disparos, la firma del acuerdo entre las autoridades y los policías en huelga permitió el despliegue de uniformados en las calles este miércoles.
La calma volvió a la ciudad durante el día, excepto algunos intentos de desvalijar algunos locales emprendidos por grupos pequeños.
Según analistas, los reclamos salariales se agudizaron luego de que en setiembre pasado, el jefe antidrogas de la policía de Córdoba y otros cuatro agentes quedaran detenidos bajo el cargo de tener vínculos con el narcotráfico.
El acuerdo firmado establece un sueldo básico líquido de un agente en unos 8.000 pesos argentinos (1.300 dólares), un 50% más de lo que ganaban pero la mitad del aumento que reclamaban los policías.
