Justin Shaw, habitante de Vilonia (Arkansas), ayuda a su vecino Nick Conway a erigir una bandera de EE.UU. entre los restos de su vivienda, destruida hasta los cimientos por los tornados.
APWASHINGTON.- Intensos vientos, granizadas que llegaron a alcanzar el tamaño de pelotas de tenis y extensos cortes de energía eléctrica han formado parte de la intensa ola de tornados y fuertes tormentas que afecta a varios estados del centro y sur de EE.UU.
Los fenómenos climáticos han dejado hasta ahora al menos 35 personas muertas, según medios de ese país.
La alerta de tornados se mantiene activa, y alrededor de 75 millones de personas habitan en las zonas de riesgo que podrían ser afectadas, de acuerdo a reportes del Servicio Nacional de Meteorología.
Las áreas más afectadas se encuentran en Misisipi, Alabama y Tennessee, donde el lunes murieron al menos 17 personas, y Arkansas, Iowa y Oklahoma, donde habrían muerto las otras 18 el domingo.
La entidad alertó que en las próximas horas se esperan "tormentas eléctricas severas en el sur de Misisipi, el oeste de Alabama y el este de Luisiana".
Los gobernadores de Alabama y Georgia declararon el estado de emergencia en sus jurisdicciones.
Falleció al rescatar a su novia
Entre las víctimas fatales se cuenta John Servati, estudiante de la Universidad de Alabama que falleció al salvar a su novia de la caída de un muro.
"Llamé a mi entrenador cuando me enteré esta mañana; quedamos desconcertados", dijo uno de sus amigos, Colton Fremont, según el diario "The Clarion-Ledger".
"Era surrealista oir que se había muerto uno de mis mejores amigos de toda una vida", agregó.
Este martes, residentes de Tupelo, en Misisipi, revisaban entre los escombros de sus viviendas y locales comerciales para rescatar muebles y otros enseres.
Voluntarios se trasladaron hasta los sectores más afectados para ofrecer hotdogs y hamburguesas a quienes perdieron todos sus bienes. Otros jóvenes ayudaban a remover restos de viviendas y ramas de árboles caídos para despejar las vías.
El tornado que arrasó Louisville, Misisipi, fue, de acuerdo con los primeros informes de meteorólogos, de categoría EF4. Los entre 265 y 320 km/h que alcanzaron sus vientos lo convertirían en uno de los más intensos en EE.UU. durante este año.
