El teatral regreso de Maiden
Marcelo Contreras 14/1/2003
Ya se quisiera cualquier credo el nivel de devoción que despierta Iron Maiden. Anoche 25 mil fanáticos disfrutaron en la pista atlética del Nacional la que, hasta ahora, es la mejor presentación de la banda británica en Chile. Un concierto que saldó la deuda que dejaron hace exactamente tres años cuando la calidad y la potencia del sonido fue menos que mediocre. Si bien el audio sólo se hizo óptimo en el final de “The trooper”, el cuarto tema del show, fue el énfasis teatral de la propuesta lo que sedujo a la audiencia. Bruce Dickinson encarnó distintos personajes durante la noche. Usó máscaras, capas y cascos, mientras el escenario mutaba de un tenebroso castillo medieval, a un campo de batalla de la Primera Guerra Mundial. Aunque Maiden confía en su último álbum, Dance of death -interpretan al menos 4 canciones del disco-, sigue siendo su material de los ’80 el que despierta verdadero furor. Es el peso de ser un clásico.
