JAÉN.- Los restos mortales del cantaor Juanito Valderrama, fallecido el pasado lunes en Sevilla, fueron inhumados hoy en el cementerio de Torredelcampo, en Jaén, el pueblo andaluz donde el artista nació hace 87 años.
Juan Valderrama Blanca, conocido con el nombre artístico de “Juanito Valderrama”, una de las grandes figuras de la copla, el flamenco y la canción española, murió en su domicilio de la localidad sevillana de Espartinas, víctima de una dolencia cardiaca.
Torredelcampo, la localidad donde el cantaor había nacido el 24 de mayo de 1919, recibió hoy la visita de miles de personas, muchas de las cuales abarrotaron la iglesia parroquial y sus alrededores, para dar el último adiós a su vecino más universal.
Para la misa funeral que precedió al entierro, el féretro había sido trasladado al templo a hombros entre incesantes aplausos.
La Agrupación Musical de Torredelcampo abría el paso a la comitiva fúnebre al son del “Emigrante” la canción que se convirtió en todo un símbolo para España y con la que Valderrama arrancó lágrimas a miles de españoles residentes fuera de su país.
El féretro entró en la iglesia cubierto por una bandera de la región de Andalucía sobre la que se había colocado su inseparable sombrero cordobés, mientras en el exterior una multitud de personas rompía en aplausos.
Dolores Abril, su viuda, sus hijos y demás familia del artista, agradecieron las muestras de apoyo y condolencia que están recibiendo.
Desde la tarde del martes, más de seis mil personas, según la Policía Local, pasaron por la capilla ardiente para despedirse de Juanito Valderrama.
Tras la misa funeral, el féretro fue trasladado al cementerio en una comitiva fúnebre de más de mil personas, entre ellas rostros conocidos del mundo de la música, del flamenco y del toreo.
Como era su deseo, los restos mortales de Juanito Valderrama reposan ya en el cementerio municipal de Torredelcampo donde están enterrados sus padres y tres de sus ocho hermanos.
El jueves se cumplirá el tercero de los tres días de luto oficial decretados por Torredelcampo, en cuya plaza permanece rodeado de flores el busto de Juanito Valderrama, una obra a la que el cantaor hizo colocar hasta en cinco ocasiones el sombrero cordobés porque -como decía- hasta un sombrero “hay que saber ponerlo con arte”.
