SANTIAGO.- Bajo la batuta del director invitado Patricio Cobos, la Orquesta de Cámara de Chile ofrecerá su tercer concierto de la Temporada 2004 en Las Condes, este miércoles 26 de mayo, a las 19.30 horas, en la Parroquia Nuestra Señora del Rosario, en Presidente Riesco 6430.
En la oportunidad, la orquesta interpretará obras de Arensky, Mozart y Beethoven.
Patricio Cobos es director y violinista, nacido en Chile y radicado en Estados Unidos. Ha realizado una carrera multifacética como violinista solista y violista, miembro del Cuarteto Rowe y en los últimos años como director de orquesta.
Recientemente fue nombrado director de la Orquesta Sinfónica de La Grange, en el Estado de Georgia, en Estados Unidos.
Ha actuado en los más diversos países del mundo junto a diferentes agrupaciones, realizando una importante carrera internacional.
Con Variaciones sobre un Tema de Tchaikovsky, del compositor ruso Anton Arensky, se inicia el concierto del miércoles 26.
Esta obra se originó en una composición dedicada a su padre que era cellista amateur. Posteriormente su segundo movimiento fue ampliado para orquesta dando origen a la presente composición que consta de un tema, siete variaciones y una recopilación o coda.
El programa continúa con Concierto N°5 para violín y orquesta en La Mayor (1775), quizás el más importante de los ocho de ese tipo que hiciera W. A. Mozart.
Su serie de conciertos no tiene rival en el Siglo XVIII y el que se interpreta en esta oportunidad es especialmente famoso por su gracia, lirismo y melancolía contenida. Por otra parte el tratamiento del violín solista -en esta oportunidad a cargo del propio Patricio Cobos- revela un conocimiento acabado de los principales recursos de este instrumento.
Para culminar, la Sinfonía N° 2, de Ludwig van Beethoven, terminada en 1802 y dedicada al Príncipe Carl von Lichnowsky, admirador y alumno de Beethoven.
Los comentarios de la época consideraron esta sinfonía como muy original y basada en las últimas sinfonías de su maestro F.J. Haydn. Sin embargo, mirada retrospectivamente se la puede considerar como un gran avance sobre la anterior Sinfonía N°1 del autor.
