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Skármeta traza un mapa personal de un Neruda alegre y vital

El escritor chileno lanza en Madrid "Neruda por Skármeta".

10 de Junio de 2004 | 11:57 | Efe
MADRID.- Con el fin de ofrecer a los lectores un mapa personal de Pablo Neruda a la vez que una antología básica de su poesía, el escritor chileno Antonio Skármeta publica un libro con el que reivindica la alegría y vitalidad del poeta en el centenario de su nacimiento.

“Neruda por Skármeta” surgió a raíz de una idea de las editoriales españolas Planeta y Seix Barral en colaboración con el escritor chileno, que hoy en Madrid lo definió como un “singular” proyecto.

Elro también refleja distintos aspectos de la vida de Skármeta, quien proviene del mismo país que el autor de “Residencia en la Tierra”, con quien mantuvo “la relación de un escritor cachorro con un autor consagrado”.

Relató que la poesía del Premio Nobel de Literatura le ayudó en su juventud a comunicarse, al tiempo que le reveló “el encanto del lenguaje”.

Un lenguaje que ha traspasado fronteras y clases sociales, por ello Skármeta, último Premio Planeta por su obra “El baile de la victoria”, dijo que el autor de “Los versos del capitán” es a la vez “muchos Nerudas”.

Así sostuvo que hay un Neruda metafísico, que retrata al hombre contemporáneo en su angustia, y otro, el más conocido, el sentimental y erótico, que escribió “Veinte poemas de amor y una canción desesperada”, que ayudó a muchos jóvenes a expresar sus sentimientos.

También, agregó, existió un Neruda celebratorio de la naturaleza y lo cotidiano y que dio voz a aquellos que no la tenían, como ponen de relieve las “Odas elementales”

Pero además, dijo el escritor, hubo un Neruda conocedor de América Latina, que ensalzó la cultura indígena, y un poeta inmerso en la realidad internacional como diplomático, una profesión que abandonó cuando le sobrevino una grave enfermedad.

Así, el libro presentado hoy en Madrid y que próximamente se publicará en América Latina, abarca desde el Neruda “que nació en la sombras vegetales del sur de Chile con alma afligida, que posteriormente descubre la luminosidad del hombre y le reilumina hasta el poeta enfermo que se retira a su país y muere diez días antes del golpe militar” contra Salvador Allende.

Un hecho doloroso del que la muerte como un juego le libró de ser testigo de unos acontecimientos que le hubieran provocado una profunda depresión, reconoció Skármeta, autor de “El cartero de Neruda”.

En cualquier caso, Skármeta reivindicó a un Neruda pleno de emociones y ante todo un ser humano alegre.

Recordó uno de los poemas de “Cien sonetos de amor” en el que se despide de su esposa Matilde Urrutia diciendo “Si muero sobrevíveme con tanta furia ... no quiero que se muera mi herencia de alegría”.

Por ello, el autor destacó que “uno de los mejores homenajes en este año del centenario de su nacimiento es recordarlo con alegría”, un sentimiento, recalcó, que le unió de una manera especial al poeta español Federico García Lorca, quien también se caracterizó por su vitalidad.

Este aniversario de Neruda, que se celebra en Chile con un gran despliegue de homenajes y difusión de su obra, no deja indiferente a grandes autores como Gonzalo Rojas, quien considera al Premio Nobel “su hermano grande”.

“El prodigio está en que él empezó siendo poeta y persistió en esa tarea, hasta ser uno de los grandes del Siglo XX”, considera Rojas, último Premio Cervantes.

Sin embargo, Skármeta reconoció que una figura “tan grande y fértil” ha sido una sombra para muchos autores hispanoamericanos quienes primero le criticaron y quisieron desembarazarse de su influencia, pero que luego reconocieron la grandeza del escritor.

“Neruda por Skármeta” incluye una selección de poemas de Neruda con los que el autor quiere explicar la relación entre la vida y la obra del poeta chileno, tomando como punto de partida algunos de sus libros, de sus amores, de sus casas, de sus mares y algunas de sus sombras y de sus luces.

La cubierta del libro quiere ser también significativa al tratarse de una fotografía en blanco y negro en la que aparece Pablo Neruda acompañado por Skármeta, entonces un joven profesor de literatura, y por Juan Rulfo.