Pagando la deuda
Marcelo Contreras 10/12/2004
Babasónicos tenía cuentas pendientes con el público chileno. Gozan de culto local, pero este año gracias a Infame (2003) coquetearon con la masividad. Tanto, que fueron convocados al show del Festival de Viña sin un concierto a escala media que registrara su verdadero arrastre en Chile.
Anoche en el Estadio Víctor Jara, el sexteto argentino llevó más de tres mil personas. Esta vez dejaron en la banca la actitud mezquina de su última visita en junio cuando estrenaron Infame, que apenas superó la hora de canciones. Abrieron su repertorio más allá del éxito comprobado de Jessico (2001) y su último álbum a canciones como "Viva Satana!" (Dopádromo (1996), "Patinador sagrado" y "Montañas de agua" (estas dos últimas publicadas hace ya diez años en "Trance Zomba"), ampliaron sus recursos escénicos (la pantalla gigante fue protagónica en varios temas), mientras que la actitud del líder y vocalista Adrián Dargelos fue definitivamente más comprometida y teatral que en el invierno, empeñado siempre en representar gestualmente sus historias de desenfreno y lujuria.
Incluso Babasónicos hizo toda una excepción a su habitual mutismo con el público para dedicar "Valle de Valium" a Víctor Jara, en el día que se dictó proceso en contra de un militar retirado por su cobarde asesinato en ese mismo recinto. Fue un momento de celebración por la música y la vida, y un gesto sensible de una banda cada vez más segura de su estilo.
