CIUDAD DE MÉXICO.- El tenor mexicano Ramón Vargas y la soprano chilena Verónica Villaroel ofrecieron anoche un concierto en el Palacio de Bellas Artes de Ciudad de México con el objetivo de reunir dinero para obras en favor de niños discapacitados.
También participaron la mezzosoprano rusa Olga Borodina y el bajo ruso Ildar Abdrazakov, quienes junto con el mexicano y la chilena interpretaron la Misa de Réquiem, de Giuseppe Verdi.
El concierto tenía por objetivo reunir un millón de pesos mexicanos (cerca de 100.000 dólares) para beneficiar a por lo menos mil familias de zonas marginadas de México que tienen niños discapacitados.
El tenor dirige desde hace cinco años el Fondo Memorial Eduardo Vargas, organismo creado para ayudar a niños con parálisis cerebral. Desde su creación, Vargas ha realizado conciertos a beneficio en el continente europeo.
Bajo la batuta de Riccardo Frizza, los cantantes estuvieron acompañados por la Orquesta y el Coro del Teatro de Bellas Artes.
El público casi abarrotó el recinto de mármol construido en tiempos del dictador Porfirio Díaz, entre fines del siglo XIX y comienzos del XX.
Vargas es considerado como uno de los artistas líricos más importantes el mundo y ha sido huésped de teatros y festivales artísticos prestigiados, como la Scala de Milán.
Verónica Villarroel, ha sido aclamada por el público en sus conciertos realizados en escenarios como el Covent Garden, de Londres, y la Metropolitan Opera de Nueva York.
Borodina es reconocida por su papel como protagonista de "Samson et Dalila", al lado de Plácido Domingo. Y Abdrazakov ha sido invitado a participar en las temporadas operísticas de importantes teatros y festivales del mundo.
