EMOLTV

Batalla legal en Londres por la música de "Buena Vista Social Club"

Una compañía estadounidense y la empresa Editora Musical de Cuba (EMC) se disputan los derechos de esta música con sabor de antaño, que volvió a resonar en 1997 con Compay Segundo, Ibrahim Ferrer, Omara Portuondo y Eliades Ochoa.

11 de Mayo de 2005 | 11:11 | AFP
LONDRES.- Viejos ritmos cubanos que dieron la vuelta al mundo gracias al éxito del álbum "Buena Vista Social Club" se convirtieron en el centro de una batalla legal, en la que dos sellos musicales se disputan su propiedad en un tribunal de Londres.

Una compañía estadounidense, Peer International Corporation, y la empresa Editora Musical de Cuba (EMC), se disputan los derechos de esta música con sabor de antaño, que volvió a resonar en 1997 al ser interpretada por veteranos como los cantantes cubanos Compay Segundo (ya fallecido), Ibrahim Ferrer, Omara Portuondo y Eliades Ochoa.

Los tribunales británicos, que empezaron a estudiar este caso el martes, deberán decidir si los compositores de la música fueron recompensados adecuadamente, o si recibieron, a lo máximo, "algunos pesos y quizá un trago de ron".

Las declaraciones de Peer, de que la Editora Musical de Cuba es dirigida y controlada por el ministerio cubano del Interior, complica el caso.

En la Corte londinense, donde los alegatos continuaron este miércoles, el representante de Peer, Pushpinder Saini, afirmó que el gobierno cubano se ha apropiado ilegalmente de los derechos sobre esa música, que le corresponden a la firma estadounidense.

Peer afirma que sus derechos sobre esta música datan de los años 1930.

Pero la Editora Musical de Cuba afirma que los compositores nunca recibieron un centavo por esas canciones, que han hecho bailar a generaciones de latinoamericanos, y ahora en el mundo entero.

El sello cubano afirma también que todos los contratos originales no son válidos porque fueron "ofertas inescrupulosas" que no están reconocidas por la ley.

Peer, que tiene los derechos de muchas de las canciones que figuran en el álbum "Buena Vista Social Club", y en el filme del mismo nombre realizado por el alemán Win Wenders, asegura que pagó derechos a los compositores hasta cuando comenzó la revolución cubana, en 1959.

Después de eso, el embargo impuesto por Estados Unidos impidió hacer pagos a Cuba, aseguró en la Corte el representante de Peer.