PARÍS.- Los herederos del pintor francés Pierre Auguste Renoir (1841-1919), el maestro del impresionismo, están indignados por la venta de objetos y archivos personales del artista prevista para hoy por una pequeña casa de subastas de Maryland, Estados Unidos.
El catálogo elaborado por la casa Hantman's incluye 137 objetos y documentos, como la bufanda de seda que siempre llevaba Renoir, sus gafas, su legión de honor, su acta de defunción o el misal de su esposa, así como varios grabados o decenas de cartas que serán puestos a la venta por un precio de entre 250.000 y 350.000 euros.
"Me duele ver la vida de mi bisabuelo instalada en un mercado público. Todos esos recuerdos íntimos deben quedar en la familia", asegura la actriz Sophie Renoir, hija del cineasta Claude Renoir, en declaraciones publicadas hoy por el diario "Le Figaro".
Los objetos puestos a la venta proceden de uno de los nietos del pintor, Paul, fallecido a principios de año en Estados Unidos, donde residía y que antes de su muerte no informó a la familia que había entregado el legado del artista a la casa de subastas.
"Por una vez, la familia se va a reunir para salvar el patrimonio", explica Sophie, al indicar que sus abogados están estudiando los medios de "retrasar la fecha de la venta para poder actuar".
Además, la familia sospecha que algunos de los objetos podrían ser falsos y espera "explicaciones sobre algunos lotes dudosos, como la mítica bufanda marrón de lunares blancos o las cerámicas de Collettes", donde el pintor tenía una casa.
La mayoría de los objetos proceden de esa vivienda situada en Cagnes-sur-Mer, que fue repartida en herencia junto a lo que había en su interior entre los tres hijos del artista, Pierre, Jean y Claude, padre de Paul.