SYDNEY.- El actor Russell Crowe asegura que expresó su más profundo arrepentimiento por su arresto en Nueva York tras lanzar un teléfono móvil al conserje del hotel y aseguró que su comportamiento se debío al "jet lag", la soledad y la adrenalina, según la entrevista concedida al "Daily Telegraph" australiano.
"Me siento fatal. No puedo comunicar lo oscura que es mi vida ahora", publica hoy el diario de Sydney las palabras de Crowe, quien concedió la entrevista desde Nueva York.
"Haré lo que sea para solucinar la situación de forma honrosa. Estoy muy arrepentido de mis actos", añadió.
Crowe, conocido por su temperamento irascible, dijo que echaba de menos su familia y esperaba que le perdonasen. "Si es necesario, pasaré el resto de mi vida intentando compensar a mi esposa".
Comentó además que le agradaba saber que su hijo Charles de un año no puede comprender todavía lo que está ocurriendo "porque eso sería algo que rompería el corazón".
El actor quería hablar con su esposa Danielle en Sydney y, frustrado porque el teléfono que estaba empleando no funcionaba, Crowe salió de la habitación de su hotel de madrugada y discutió con el conserje Nestor Estrada en la recepción antes de lanzarle el aparato.
Estrada fue atendido por la herida y necesitó puntos de sutura por golpearle con el teléfono en la cara, aunque Crowe negó haber apuntado al hombre cuando lanzó el celular. El incidente condujo a que el actor fuese detenido por la policía.
"Yo no quise darle, pero no hay excusa que valga", señaló. "No hay nada que puedas decir para explicar a la gente la combinación de 'jet lag', soledad y adrenalina", dijo en su descargo.
