LOS ÁNGELES.- Debbie Rowe, la ex mujer de Michael Jackson y madre de sus hijos Prince Michael (de ocho años) y Paris (de siete), obtuvo el miércoles en los tribunales de Los Ángeles una victoria parcial en su lucha por la custodia de los menores.
En 2001, Rowe cedió los derechos sobre sus hijos tras su divorcio de Jackson. Pero según medios estadounidenses, el tribunal de apelaciones declaró que no era jurídicamente válido, ya que entonces no se realizó una investigación para evaluar si esa decisión sobre la custodia era lo mejor para los niños.
Ahora, un juez de familia decidirá sobre una nueva normativa de visitas y custodia.
Rowe describió en una principio a Jackson como un padre excelente. En 2003 cambió su opinión y comenzó a luchar por una custodia parcial alegando -entre otros motivos- las acusaciones de abusos a menores contra el cantante, que el año pasado fue exculpado en un juicio.
Desde entonces pasa la mayor parte del tiempo con sus niños en el emirato de Bahrein. Jackson es además padre de otro hijo, Prince Michael II, que tiene unos cuatro años. Hasta la fecha, el cantante ha mantenido en secreto la identidad de la madre.
Rowe era auxiliar de enfermería cuando conoció a la estrella del pop en los 90 en un centro médico de cirugía estética. Tras tres años de matrimonio, Jackson y Rowe se divorciaron por "diferencias irreconciliables".