RÍO DE JANEIRO.- Los bomberos de Rio de Janeiro dijeron hoy que no disfrutaron del show de los Rolling Stones, y lo calificaron como un verdadero "infierno".
Explicaron además que tuvieron que llevar a 600 personas al hospital por coma etílico, rescataron a cuatro personas del mar cuando se hundió un catamarán y hasta asistieron a un parto en medio del concierto.
"Fue un infierno con 'i' mayúscula. Es terrible no poder pasar entre la multitud cargando gente en las espaldas", comentó el subjefe de bomberos de Copacabana, Marcos Silva.
Según los bomberos, 1,3 millón de personas asistieron al show gratuito de los Stones y el 90 por ciento de los 600 "rescatados" entre la multitud fue internado por "coma alcóholico para ser atendido en los hospitales".
La Policía Militar, en tanto, registró tres heridos por arma blanca luego que las víctimas se resistieron a ser robadas.
El Ministerio Público denunció a la alcaldía de Río de Janeiro por no haber previsto un plan de tránsito de emergencia para las ambulancias durante el día del show.
