Iniciada a la par que grupos chilenos de los ’90 como Pánico y Congelador, la más longeva de las bandas de la escena rockera actual anuncia su disolución y se divide en tres: The Ganjas, Electrozombies y Horror Love.
Paulina Cabanillas F.
Samuel Maquieira (guitarra), Héctor Piri Latapiat (batería) y Miguel Comegato Montenegro (voz y bajo) ponen fin a Yajaira (foto: Aldo Benincasa). |
"Todos los pozos profundos viven con lentitud sus experiencias: tienen que esperar largo tiempo hasta saber qué fue lo que cayó en su profundidad", escribió el filósofo alemán Friedrich Nietzsche en su libro "Así habló Zaratustra". La frase es aplicable a la historia de Yajaira, un grupo de paso flemático, aletargado, lento y real, como el título de su segundo disco, que no reparaba en hacer canciones de ocho o más minutos. Un trío de guitarras pesadas y efectos sedantes que parecía hacer música desde las mismas entrañas de un volcán en actividad.
Después de once años de carrera, Yajaira anunció el 16 de mayo su disolución a través de su fotolog. Pero si bien el cráter está apagado, sus integrantes seguirán activos. Su vocalista y bajista, Miguel Ángel
Comegato Montenegro, se dedicará a tiempo completo a Electrozombies, el trío que formó en 2002 junto a Paola y Marcela Zamorano. El guitarrista, Samuel Maquieira, continuará recorriendo los escenarios con The Ganjas, cuarteto que integra desde 2001, y el baterista Héctor
Piri Latapiat invertirá su tiempo en Horror Love, su actual banda.
"Fue el cierre de un ciclo natural", cuenta el cantante. "Además yo veía que no estábamos avanzando mucho. O sea, tenemos seis discos y la raja, pero eran más como pasos al lado, no hacia adelante. Creo que esta decisión es sana porque estar dándole once años es complicado, más en un país como este en el que llegas a un tope y no puedes hacer mucho más. Nosotros hicimos discos, tocamos caleta, nos fuimos a Europa en 2002 y llegamos como al límite, como que de pronto volvimos al principio".
Diez días antes de su separación, el trío actuó en "Grandes Valores del Rock Actual", festival realizado en el galpón Víctor Jara donde compartieron cartel con Guiso, Hielo Negro, Ramires!, Matorral y Leo Quinteros. El mismo lugar donde celebraron sus diez años de trayectoria y en el que finalmente y sin saberlo, dieron su última presentación en vivo. "Si uno se pone a analizar te das cuenta de que fue como un montón de llaves que se cerraron, como que el círculo se terminó de redondear", explica Comegato.
-¿Sabían que iba a ser el último concierto?
Comegato: "Yo lo tenía más o menos en mi mente, pero para esa fecha no lo habíamos conversado. Fueron hartas cosas que se juntaron, el año pasado habíamos celebrado nuestros diez años ahí, hace poco habíamos actuamos con Sebastián Arce, nuestro primer baterista (actual integrante de Pánico), y volvimos a la formación de cuatro y a tocar canciones que no tocábamos desde hace como siete u ocho años. Entonces esta separación es como lógica, bien espontánea, como siempre fue el grupo".
Samuel: "Lo teníamos medio cachado, como que estaba siendo complicado seguir y esa tocata estuvo potente. Para mí Yajaira fue un pilar en el momento en que me decidí por la música, pero no es tanto tampoco porque no fue un drama ni hay mala onda ni mucho menos. Está bien para liberarse un poco, para que sigan los proyectos de cada uno".
Piri: "Yo no sabía que iba a ser el último, último, pero estuvo increíble, a pesar de que toqué con una caña del demonio. Igual de repente no podíamos ensayar, los tiempos de cada uno no coincidían, todo influyó al final para que pasara esto.
La vida es así
Yajaira comenzó a escribir su historia en 1995, fusionando la experiencia que sus integrantes tuvieron al pasar por grupos como Jusolis, en el caso de Samuel, Necrosis y Supersordo en el de Comegato, y Reabatri, Ébano y R.E.O en el caso de Piri. En 1998 editaron su primer disco
Yajaira y al año siguiente grabaron el segundo,
Lento y real, que fue distribuido en Europa y Australia por el sello holandés Freebird Records. Para esas fechas, Yajaira era un cuarteto. La batería la ocupaba Sebastián
Flecha Arce, que abandonó el puesto en 2003 para radicarse en Francia junto a su otra banda, Pánico, y Piri figuraba como guitarrista invitado.
"Esa vez había terminado Yajaira porque no teníamos baterista, y ahí yo me pasé de la guitarra a la batería. Entonces ya esta segunda vez no puedo hacer más, no puedo cantar, tocar el bajo y la batería, así es que si no se puede seguir tocando, todo bien, cero atado. Aunque yo hubiese seguido tocando", dice bromeando.
Lo seguirá haciendo, pero en Horror Love, el trío que formó en septiembre de 2005 junto a Memo Barahona (baterista de Fiskales Ad-Hok) y Jano, ex integrante de R.E.O. Claro que acá vuelve a la guitarra y se adueña del micrófono. "Hago las letras, la música, me desahogo más que en Yajaira, porque Yajaira era un trabajo colectivo, todo lo hacíamos entre los tres".
-¿Formar Horror Love fue idea tuya?
Piri: "Mía y del Memo, a él lo conozco de pendejo, onda del barrio".
-¿Por qué le pusieron así?
-"Yo le puse el nombre… porque la vida es así,
horror love. Quizás por eso el grupo tiene un sonido más crudo, toma raíces más callejeras, más hardcore, es más
horror, más rápido, así como cuando tocaba en R.E.O. Aparte que las películas de terror me tienen
sicoseado".
Samuel Maquieira también tiene sus planes. Después de viajar por España, Marruecos e Inglaterra entre noviembre y febrero de 2005, el cantante y guitarrista volvió a Santiago para reintegrarse a The Ganjas, el cuarteto del que forma parte junto a Rodrigo Astaburuaga (guitarra), Rafael Astaburuaga (bajo) y Aldo Benincasa (batería), y que el año pasado publicó su segundo disco
Laydown (2005, Algo Records).
"Estoy básicamente concentrado en el nuevo álbum que esperamos que salga a fin de año. Hice harta música y letras para el grupo mientras estuve viajando y algunas de esas canciones ya las hemos tocado. Las estamos grabando para el próximo disco".
-The Versions, el grupo que tienes con Luciano Mariño y Aldo Benincasa ¿sigue en actividad?
-"Sí, es que Versions es una banda que surge así por vacilar, por tocar de repente en algunos bares, de tocar algunas canciones de grupos que nos gustan. Salió así de repente y la idea es estar siempre moviéndose, pero no hay ningún apuro".
-¿Y como "Choro Makena" te vas a volver a presentar?
-"No, es que Choro Makena no es un grupo, sólo toqué una vez con el Tío Rafa (vocalista y guitarrista de Tabernarios) con ese nombre. Pero en una de esas sí, ahí de repente nos juntamos, armamos algo. Eso estaba harto bueno también", comenta riéndose.
Las chicas la llevan
El nombre que escogió Comegato para su proyecto paralelo también parece sacado de filme de miedo: Electrozombies. Formado en 2002 y compuesto también por las hermanas Marcela y Paola Zamorano (bajo y batería respectivamente), el trío de doom metal editó su disco debut en 2005 por el sello CFA. Se tituló
Electrozombies, denominación que según su líder salió así, al azar, casi al igual que el grupo.
"En nuestra casa tenemos una sala de ensayo y cuando los grupos no iban, nosotros tocábamos, pero era una cosa así súper como para entretenerse, sin ninguna pretensión", recuerda. "Pero de repente Samuel (Maquieira) nos prestó una grabadora, grabamos unos ensayos, los escuchamos y los mostramos y gustó. Subimos un par de temas a internet, inventamos un nombre, que se nos ocurrió así de la nada, así sin pensarlo mucho, como un chiste y la cosa prendió".
-¿Te sorprendió que haya prendido?
Comegato: "Sí, pero no. Igual ver chicas tocando es raro, cada vez hay más pero todavía sigue siendo raro y eso es llamativo. Más lo es por la música que tocamos, porque es un estilo súper dominado por hombres. Hay chicas tocando en bandas pop, pero así tocando con la intensidad, el volumen y el sonido de nosotros, llama la atención, hay pocas bandas tan pesadas. Afuera no, está lleno. Afuera las chicas las llevan".
-Después de tocar tantos años con puros hombres ¿te acostumbras a tocar con dos mujeres?
-"Los hombres son pesados siempre y las chicas son pesadas unos días no más y eso es bacán, es la raja. Estamos súper sorprendidos porque a pesar de que la música es densa, nos ha ido bien. Tenemos un montón de tocatas y en septiembre nos vamos a una mini gira por Europa. Vamos a España, Francia, Suiza, Holanda, Bélgica y Alemania".
-¿Cuesta desligarse del sonido espeso de Yajaira?
-"Sí, pero esa cosa visceral, pesada, es algo que siempre he buscado. Quizás por eso siempre he tocado bajo porque son cuatro cuerdas, es más simple, siempre buscando lo más elemental. Pero Electrozombies tiene un estilo mucho más primitivo, creo que es como pre-rock, como que viene de la cosa más animal, deja de lado todos los adornos, las sutilezas y llega la esencia misma, al primitivismo del rock. Yo creo que por ahí va nuestro camino".
