SAN SEBASTIAN, España.- El actor neoyorquino Matt Dillon aseguró el viernes que le gustaría trabajar a las órdenes del cineasta español Pedro Almodóvar, horas antes de recibir el Premio Donostia a su trayectoria artística, que le concederá el 54 Festival de Cine de San Sebastián.
"En España tienen a Almodóvar, que es increíble, es un gran contador de historias", respondió Dillon, al ser interrogado sobre con qué director de cine europeo le gustaría trabajar.
"Hay muchos directores estadounidenses y europeos con los que más gustaría trabajar. Y hay muchos papeles que me gustaría hacer", añadió Dillon, de 42 años, que empezó su carrera cinematográfica cuando tenía 18 años en "The Outsiders" (Rebeldes, 1982) de Francis Ford Coppola, de quien dijo ha sido su "mentor" y con quien aseguró "volveré a trabajar".
Vestido de negro, el actor nacido en Neu Rochelle (Nueva York) que se ha caracterizado casi siempre por interpretar a personajes conflictivos y hasta odiosos como el policía racista de "Crash" (2004) de Paul Haggis, explicó que siempre le interesaron "los papeles complejos".
"Nunca he dependido de mi aspecto", aseguró el actor que en varias ocasiones se refirió a su papel en "Factotum" (2005) de Bent Hamer, en el que interpreta a Henry Chinaski, el alter ego de ficción del escritor estadounidense Charles Bukowski, considerado uno de sus mejores trabajos como actor.
Matt Dillon, sobrino nieto de Alex Raymond, uno de los más grandes creadores de historietas como Flash Gordon, que ha actuado en más de 40 películas a lo largo de su carrera, recibirá la noche del viernes el Premio Donostia a su trayectoria artística, distinción que el pasado domingo le fue entregada al actor sueco Max Von Sydow.
"La ley de la calle", "Drugstore cowbowy", "A kiss before dying", pero también "Buscando a Mary", Matt Dillon, un aficionado a la música cubana, a coleccionar discos de vinilo y fan de los New York Mets de béisbol, debutó en 2002 como director de cine con un thriller ambientado en Camboya titulado "City of Ghosts".
El actor espera poder volver a vivir esa experiencia "maravillosa" con la historia de Moon Dog, un músico de la calle en el Nueva York de los años 40 y 50 que murió hace poco en Alemania, sin contar con que le gustaría interpretar él mismo el papel.
