Warner se va de China por nueva ley del gobierno

SHANGHAI.- El gigante estadounidense del entretenimiento, Time Warner, ha decidido retirarse del negocio de los cines en China después de la aprobación de una ley que impide a inversores extranjeros poseer una parte mayoritaria de las acciones en sus empresas mixtas, informó hoy el diario "China Daily".

Time Warner estableció en 2003 los primeros cines de China controlados por una firma extranjera, los Shangying Warner Cinemas, animada por una política experimental del Gobierno chino, que permitía a los inversores foráneos controlar hasta el 75 por ciento del capital en siete ciudades, entre ellas Shanghai, Beijing y Cantón.

A finales de 2005, Beijing aprobó un nuevo paquete de normas que impiden al inversor extranjero convertirse en el accionista mayoritario de una empresa mixta de salas de cine, y la compañía no tiene más remedio que retirarse, según el portavoz de Time Warner en China, Gao Ming.

"No se retiró inmediatamente después del cambio de la ley debido a sus compromisos a largo plazo con sus socios", explicó Gao.

La medida del Gobierno fue diseñada para defender al cine chino en su propio mercado, ya que "las empresas extranjeras quieren proyectar películas producidas en el extranjero, para hacer dinero a la vez que rechazan las películas culturales chinas", señaló Wang Tianyun, vicepresidente de Shanghai Film Group, socio de Warner.

Para proteger a su cine nacional, que incluye tanto producciones de entretenimiento como películas de propaganda política, China limita la proyección de filmes extranjeros a una veintena de títulos al año.

Con todo, Wang reconoció que "la retirada de Time Warner del mercado podría disminuir la confianza de las empresas con inversión extranjera ante su entrada en el mercado chino del entretenimiento, que está creciendo rápidamente".

Otras firmas extranjeras han invertido en el sector chino del entretenimiento, como Walt Disney, Viacom y Eastman Kodak.

En la actualidad, Time Warner opera seis salas de cine en China con socios locales, y tenía la intención de aumentar esta cifra hasta la treintena en los próximos años.

Pese a su retirada de las salas, mantendrá en China sus empresas mixtas de vídeo doméstico y de productos promocionales de sus películas.