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Santiago: Domingo 14 de diciembre del 2025 | Actualizado 20:25
No hay duda, la Pequeña Gigante tuvo el rol protagónico de Santiago a Mil 2007.
José Alvújar, El MercurioSANTIAGO.- Sumido en un "estado catártico" tiene a los organizadores de Santiago a Mil el cierre del festival. Así lo siente Carmen Romero, directora de la productora Romero & Campbell, que hoy cerró oficialmente el ya tradicional festival de teatro que se celebra cada año en enero.
Romero no es la única que lo siente así. "Estamos un poco tristes. Como con una depresión posparto", explica Alain Bourdon, agregado cultural de la embajada de Francia. "Pero por otra parte ya estamos impacientes por saber qué podemos hacer en 2008".
Es que la euforia y asistencia que provocó el espectáculo de "La Pequeña Gigante y el rinoceronte escondido" los últimos tres días del Festival, se suman a un 90% de ocupación de todas las salas que ofrecieron montajes que fueron parte de la programación.
"Todo fue mucho más grande de lo que imaginábamos. Doscientos mil personas nos pusimos como meta y sueño para esta versión del festival, y juntamos casi un millón de asistentes entre la Región Metropolitana y Antofagasta", cuenta la directora, que agregó que, pese a que se habla de esta cifra, "seguimos calculando porque aún no contamos con número definitivos".
La superación de las expectativas ya comenzó el día de la inauguración, con la compañía nacional La Patogallina y su obra "1907, el año de la flor negra". "Esperábamos 3 mil personas y llegaron 5 mil. Ahí nos dimos cuenta que nunca más podíamos poner rejas".
Con pasacalles como "Peces", de la compañía catalana La Sarruga, y la travesía de la Pequeña Gigante por Santiago, "recuperamos nuestros espacios públicos, algo que ha sido fundamental", afirma Romero.
Con estos resultados la directora de la productora pudo decir tranquilamente que "cumplimos con la misión. Demostramos que sí se puede, que necesitamos cultura y que el Festival dio un gran paso, como lo anunciamos el día del lanzamiento".
Chile a Mil
Tras el multitudinario éxito de Santiago a Mil este año, inevitablemente surge la pregunta sobre qué esperar para la siguiente versión. Como lo graficó Mauro Valdés, vicepresidente de Asuntos Corporativos y Comunicaciones de la Minera Escondida: "Ahora estamos frente a un tremendo problema, agradable problema por cierto, de cómo superar la altísima vara que nos pusimos este año".
"Próximo año queremos todo Chile", aspira Carmen Romero para la venidera versión del Festival de la Fundación Fitam. "Al igual como ocurrió en Santiago, para 2008 queremos lo mismo en todo el país".
Por otra parte, dado que una de los grandes ausentes de este año fueron los montajes de otros países de la región, la directora anunció que "no queremos cortar el lazo con América Latina, y por eso prometemos que el próximo año volveremos con el teatro latinoamericano".
La socia de Romero & Campbell aprovechó este momento para comenzar a hacer los llamados de rigor a la empresa privada, "para que sigan el ejemplo de Minera Escondida y Entel PCS, y se unan a nuestro gran proyecto, ya que con un Gobierno que tiene recursos limitados, el aporte de los privados es fundamental".
Santiago a Mil sigue extraoficialmente
• 1 millón de personas presenciaron los montajes de sala y calle.
• 700 mil personas participaron del espectáculo de La Pequeña Gigante y el Rinoceronte Escondido.
• 265 mil personas presenciaron el resto de las obras, entre teatro callejero y público de salas.
• El segundo espectáculo callejero más visto fue Peces, de la compañía Catalana La Sarruga, que sólo en Antofagasta reunió a 40 mil personas.
• Más de 35 mil personas suman la totalidad del público de salas.
• Las 3 obras internacionales más vistas fueron "Masurca Fogo" - de la coreógrafa Alemana Pina Bausch-, y "Sizwe Banzi está muerto" y "El Gran Inquisidor" –del inglés Peter Brook-, que en suma congregaron alrededor de 8.500 personas en el Teatro Municipal y el Teatro Universidad Católica, respectivamente.
• El montaje nacional más visto fue "Hedda Gabler", con 4.367 espectadores. Lo siguieron las obras: Casa de Muñecas, Neva, Gulliver, Ayer y el Jardín de los Cerezos.
• En el año 2006 la asistencia alcanzó a los 150 mil espectadores. Este año se calcula que fueron alrededor de un millón.
• De los 800 millones de pesos que cuesta el festival, el 65% pertenece a aportes de la empresa privada; un 15% corresponde al subsidio del gobierno de Chile; y el otro 20% a aportes de la Embajada de Francia, Alemania, España, Japón, y a la taquilla de los montajes de sala.
Santiago a Mil en imágenes
